Desde el 1 de enero de 2022, todos los autos 0Km vendidos en Argentina deben incluir de fábrica el ESP, un sistema de seguridad activa. Se trata de un dispositivo que adquirió el carácter de obligatorio desde este año y se suma al doble airbags y el ABS.
El ESP (o ESC según la marca) es la sigla en inglés del Sistema Electrónico de Control de Estabilidad. Básicamente, el mecanismo adapta la presión de frenado de cada rueda, disminuyendo el riesgo de derrapes en situaciones de emergencia. Al mismo tiempo, coordina varias funciones del vehículo, como la tracción y el sistema de frenado.
Todo mediante la utilización de sensores, los que detectan si el auto se dirige en un sentido diferente al indicado por el volante. Así, corrige el rumbo evitando la desviación y, a la vez, disminuye la potencia del motor y activa los frenos para mantener la trayectoria.
Pues bien. Esta medida había sido postergada en 2017, cuando iba a comenzar a regir luego de la incorporación del ABS y doble airbag tres años antes. Pero las automotrices lograron posponer la implementación del ESP hasta el mes pasado. Ahora, el objetivo no solo busca que se fabriquen vehículos más seguros. También significa un avance en materia de seguridad vial para el país, donde se nota claramente el atraso en ese rubro.
“Desde la actual gestión tomamos la decisión de no prorrogar esta normativa. Y pese a los pedidos de la industria automotriz de volver a posponer esta exigencia en función de que Brasil lo hizo de nuevo”, dijo el director ejecutivo de la ANSV, Pablo Martínez Carignano.
Y añadió: “los requisitos incluyen a todos los nuevos modelos y a los que están en producción. Permitirá que los argentinos se trasladen en vehículos más seguros”.
“Estamos trabajando y llevando adelante todas las acciones y políticas necesarias que ayuden a reducir la siniestralidad vial en el país”, concluyó el funcionario.
Por su parte, también es obligatorio el ensayo de impacto lateral. Es una prueba que sirve para evaluar la resistencia de las estructuras de los vehículos entre las puertas traseras y delanteras. Su implementación tiene como fin garantizar la protección adecuada ante eventuales siniestros viales e impulsa el desarrollo e instalación de tecnologías preventivas como las bolsas de aire de cortina o de impacto lateral, entre otras.
Asimismo, indicaron que esta resolución de la ANSV implica el fin de serie para algunos modelos que dejaron de fabricarse pero que aún pueden encontrarse en los concesionarios. Varias empresas fueron autorizadas a comercializar un stock remanente de más de 2000 vehículos que a la fecha no cuentan con ese requisito.
Se trata de los modelos Peugeot 308, 408 y Citroën C4 Lounge; Renault Master, Kwid y Duster Oroch; y Volkswagen Gol. En Motorweb analizamos estos modelos (ver aquí), porqué algunos se despidieron (ver aquí) y otros lo incorporaron para seguir en carrera (ver aquí y aquí).