A casi cinco años de su debut en el mercado local nos subimos nuevamente a la Chevrolet Equinox, un modelo que a pesar del tiempo transcurrido continúa generando sensación de novedad en el público. Si bien fue renovada a fines de 2022 (ver lanzamiento) lo que marcó la llegada de la variante RS de la nota, lo cierto es que las trabas a las importaciones y el poco stock disponible de unidades la convierten en un modelo poco visto, pero que aún se mantiene vigente. Aquí una prueba sintética en tan solo 8 items.
DISEÑO
Desde su llegada y su posterior renovación en 2022 la Equinox supo llamar la atención. Personalmente siempre me pareció distinto su remate trasero, y que su diseño en cierta forma oculte las proporciones definitivas, que no son acotadas: mide 4,65 metros de largo, con una distancia entre ejes de 2,73 metros. En 2022 adoptó un rediseño exterior que renovó la máscara frontal con nuevas ópticas bipartidas delanteras, al mismo tiempo que las posteriores fueron renovadas. Mientras que la variante RS (con aspecto deportivo) reemplazó a la LT, en este caso con mayor equipamiento de serie y detalles que la visten mucho más, pero conservando el sistema de tracción simple (delantera). La Premier, en cambio, mantiene la tracción integral, aunque en ambos casos con el mismo motor, 1.5 litros de 172 CV. Como detalles estéticos la RS tiene llantas de color oscuro, al igual que los insertos cromados, mientras que los logos, incluyendo el de Chevrolet, son de fondo negro.
INTERIOR
El habitáculo de la Chevrolet Equinox RS no hace más que ratificar que se trata de un SUV basado en una plataforma de un auto mediano. En este caso comparte su base estructural con el conocido Cruze, aunque en este caso ofrece un espacio interior mucho más aprovechable. La posición de manejo permite una conducción relajada, y el espacio posterior es sumamente amplio, aunque no demasiado configurable. Al menos permite la reclinación por mitades de los asientos, que a su vez son rebatibles con suma facilidad, incluso con comandos desde el baúl. El último tiene 468 litros y un cobertor retráctil que denota una calidad acertada, que en esta versión se destaca por su monotonía en color negro.
EQUIPAMIENTO
Como ya dijimos, esta Chevrolet Equinox RS dispone de mayor equipamiento que el disponible en la pasada variante LT. Por empezar monta llantas de 19 pulgadas que enaltecen el diseño, pero en el interior se hacen presentes algunos detalles de jerarquía, como butaca del conductor con reglaje eléctrico, tapizado de símil cuero y un completo paquete de conectividad, compuesto por sistema multimedia con Android Auto y Apple Carplay, WIFI nativo, navegación integrada, acceso y arranque manos libres, OnStar y otros detalles. La versión Premier mantiene algunos extras como cargador inductivo de smartphones, portón con apertura eléctrica o bien el techo panorámico vidriado.
SEGURIDAD
Al igual que lo sucedido en el equipamiento de confort, el nivel de seguridad de esta Equinox RS dispone de ayudas a la conducción, tales como alerta de impacto frontal con detección de peatones y asistente de mantenimiento de carril entre lo más importante, que se agregan a ópticas LED delanteras con luces altas automáticas de buena respuesta, pero que no son de lo más poderosa o «inteligentes» del mercado. También entrega visor de presión de neumáticos, 6 airbags y algo que no puede medirse, pero una sensación de control muy bien lograda para un SUV. Con respecto a la Premier aquella entrega sensor de ángulo ciego y de cruce trasero como exclusividad, y en ambos casos no ofrecen control de velocidad crucero adaptativo.
MOTOR
El cuatro cilindros de 1.5 litros 172 caballos de fuerza que entrega un torque máximo de 275 Nm a partir de 2.500 rpm se muestra por demás eficaz, no solo en su contundencia en la que obtiene marcas de 9,5 segundos para pasar de 0 a 100 km/h, sino también en materia de consumo. Por ejemplo en la ruta obtiene un rendimiento adecuado, que a velocidades legales (120 km/h) ronda en 12,5 kilómetros por cada litro, mientras que en la ciudad el rendimiento se estanca en unos 9 kilómetros por litro, que no resultan malos para las proporciones. La caja automática de seis velocidades resulta muy suave en el pasaje de velocidades, y si bien carece de un modo manual convencional, dispone de una tecla en el selector para poder efectuar rebajes por ejemplo en caminos de montaña.
CONDUCCIÓN
Si bien se comercializa como un SUV, no debemos olvidar que la Equinox y precisamente esta RS resulta un gran aliado para viajes en ruta. Presenta una firme conducción gracias a la suspensión independiente en las cuatro ruedas, con lo que logra una firmeza destacada, aunque esto no se traduce en un andar áspero, incluso a pesar de los neumáticos de 19 pulgadas, que presentan un perfil no demasiado bajo. Las pocas intensiones fuera de camino se ratifican con un despeje al suelo algo limitado, aunque se mejoró el ángulo de ataque con respecto a la serie previa, que era muy recurrente a rozar abajo en cunetas no demasiado pronunciadas.
COMPETIDORES
En la actualidad hay muchos modelos a los cuales se los puede considerar como competidores de la Chevrolet Equinox, uno de ellos la Volkswagen Taos de producción local, o bien el Jeep Compass fabricado en Brasil. También el Toyota Corolla Cross líder en el segmento y disponible con motor naftero, o bien en opción híbrida, entre varios otros. Sin embargo pocos entregan una variante con la estética deportiva de esta Equinox, motivo que puede ser una de las decisiones de compra de un público joven. Sin embargo el precio, de 16,4 millones de pesos durante junio de 2023 en Argentina resulta elevado, aunque no tanto si se compara con el tope de gama de la Volkswagen Taos, que se vende a 15,8 millones de pesos en su configuración Highline Bitono.
