Aunque en Argentina no hayan sido una constante, la historia cuenta que Fiat está considerada como una de las marcas automovilísticas con mayor experiencia en la producción de automóviles descapotables, o al menos entre las marcas generalistas. Incluso hasta 1930 Fiat ofreció versiones Torpedo (4-5 plazas) y como así también Spider (2 plazas) de la mayor parte de sus modelos. Y ahí inició su historia de modelos a cielo abierto, con tinte deportivo. 

Luego de una breve pausa, tras la Segunda Guerra mundial Fiat volvió al ruedo con un nuevo convertible, el 1100 TV Transformabile, presentado en el Salón de Ginebra de 1955. Se trataba de un atractivo roadster de dos plazas, inspirado incluso en el Chevrolet Corvette. Sin embargo, su motor de 56 CV quedaba muy lejos de lo esperado, lo que llevó al desarrollo de un modelo más potente.

Fiat 1100 TV

Las negociaciones con Pininfarina y el fabricante de motores OSCA, emparentado con Maserati, dieron lugar al Fiat Pininfarina Cabriolet, que se comercializó entre 1956 y 1966 en versiones coupé y cabrio de dos puertas, con una mecánica de 1.2 litros, que desarrollaba 80 caballos, para posteriormente pasar a un motor de 1.6 litros y 90 CV.

Deportivos sin techo: Fiat y su devoción por los Spider

Su sucesor supondría un salto cualitativo. A mediados de los años 60, Ferrari buscaba un fabricante de automóviles para homologar un nuevo motor para la Fórmula 2, un proceso para el que era necesario presentar un modelo de serie que lo equipara bajo el capó. En Mirafiori abrieron las puertas de par en par al “Cavallino Rampante” y, con diseño Pininfarina, se lanzó el Fiat Dino, quizás el auto más imponente fabricado por la marca en su historia. Allí no faltó una versión Spider, que podía alcanzar una velocidad de 200 Km/h, gracias a su mecánica de alta tecnología, capaz de desarrollar 180 caballos de fuerza.

Fiat Dino

Paralelamente Fiat situaba en su gama alternativas más económicas, como el 850 Spider: se trataba de un coqueto automóvil de dos plazas, aerodinámico, con diseño Bertone y un motor de 843 cm3 y 49 CV. Y aquí, existe algo para resaltar: en Argentina se produjo el Fiat 800 Spider, que junto a la Coupé estaban basados en la plataforma del 850, pero con un diseño elaborado por Vignale, que si bien exitió en Europa, nunca fue producido en serie por Fiat de manera directa, salvo en la planta de Caseros, por entonces propiedad de Fiat Concord. Además fue el único Spider producido en serie por nuestra industria. 

Asimismo el 124 Sport Spider fue parte de la oferta de la marca entre 1961 y 1981, pasando a ser comercializado por Pininfarina hasta 1985, y teniendo incluso un aceptable nivel de ventas en los Estados Unidos.

Fiat 124 Sport Spider

La era moderna

De todas formas vinieron épocas más difíciles. En las décadas de los 80 y 90, Fiat se centró en desarrollar versiones cabrio de sus modelos de serie en Europa, e incluso en Argentina existieron algunos proyectos particulares sobre el Fiat Uno. Más aquí en el tiempo, en 1994, Bertone desarrolló el Punto Cabrio, como una revolución. Sin embargo estaban faltos de nervio y picardía. 

Quizás el último Fiat, típicamente spider, fue el Barchetta, producido entre 1995 y 2006. Fue diseñado por por Andreas Zapatinas y Alessandro Cavazza con una clara inspiración en el mundo náutico y la competición automovilística, sobre la plataforma del mismísimo Punto, pero con motores algo más enérgicos. Sin embargo nunca se le perdonó el hecho de contar con tracción delantera. 

Fiat 124 Spider

Si bien el 500 se ofrece con una variante de techo abierto, aunque con parantes, luego del Barchetta Fiat no volvió a desarrollar ningún otro descapotable, aunque sí llegó a comercializarlo. El 124 Spider de segunda generación, aunque en este caso no era más que un Maxda MX-5 (Miata) con estética Fiat. Sin embargo no puede pasarse por alto por el hecho de contar con tracción trasera, motor longitudinal y un verdadero espíritu deportivo que pueden considerarlo como el último eslabón de una cadena que en la actualidad parece no tener continuidad. 

Por René Villegas

Periodista y fanático de los autos y el automovilismo desde que tengo uso de razón. Colaboré en las revistas Auto Plus y Parabrisas, y desde 2019 edito Motorweb Argentina.

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