Hace pocos días, Chevrolet presentó la gama 2022 de su producto nacional, el Cruze RS y el Midnight, pero casi pasó inadvertida la otra novedad: la versión LT AT, es decir, la entrada de gama con caja automática. Esta configuración abarca a ambas carrocerías. En este caso, aprovechamos parar tomar contacto con el hatchback de cinco puertas.

Hay que aclarar que en ningún caso proponen novedades mecánicas. Por eso, vamos a describir un producto que ya hemos probado anteriormente (en versión LTZ) pero que también pese al paso de los años se muestra como muy confiable y equilibrado.

Por fuera, este “nuevo” Chevrolet Cruze LT AT se diferencia por tener menos apliques cromados, luces halógenas en vez de LED, llantas sin oscurecer y por los faros traseros de diseño anterior. Solo alguien con el ojo algo entrenado puede percibir esto último.

El Cruze es un auto que aunque no llame la atención ni rompa códigos estilísticos aún se mantiene vigente en el tránsito de nuestras calles. Por dentro, vemos que también se diferencia de las versiones LTZ y Premier pero sin llegar a perder tanto equipamiento que el cliente de ese segmento prefiere.

Por ejemplo, el tapizado es símil cuero en color gris oscuro. El volante está revestido y cuenta con todos los mismos comandos, incluído el control de velocidad crucero. El climatizador es automático de una sola vía y la pantalla es un poco más pequeña. Posee Apple Carplay y Android Auto mediante cable pero sí wifi nativo a bordo hasta para 7 dispositivos en simultáneo. Hablando de eso, no cuenta con cargador inductivo de celulares.

En equipamiento, decíamos, pierde el techo corredizo y el sensor de estacionamiento delantero, ya que cuenta con el trasero y cámara de retroceso. Y el arranque que es por llave y no por botón, sistema cada vez es más común en muchos modelos.

Si hablamos de espacio, tampoco habrá sorpresas, tanto adelante como atrás. En este último sector, es bueno para las piernas y no tanto en altura debido a la caída del techo. Allí, solo ofrece un apoyabrazos central con posavasos. No hay salidas de ventilación pero sí un cargador de 12v, algo que parece desactualizado para estos tiempos. Vendría mejor un puerto USB.

Con solo 290 litros, el baúl es bastante justo para una familia tipo. La boca de acceso es un poco alta lo que aumenta ese “efecto cajón” a la hora de dejar cosas dentro. Tampoco colabora el auxilio de tipo temporal. En general, es un auto bien terminado, con buenas sensaciones al tacto en los materiales, y solo algún que otro borde áspero en los inyectados.

Motor

Como decíamos, mecánicamente no hay cambios. Se mantiene el motor 1.4 turbo de 153 CV, que ahora en esta versión se ofrece con la transmisión automática de 6 marchas. No tiene levas en el volante pero sí modo secuencial desde la palanca. 

En el uso diario, se percibe ágil y con cierta respuesta en alta pero siempre dando prioridad al confort. No es un deportivo aunque logra buenas cifras: acelera de 0 a 100 en 9” y llega a una máxima de 211 km/h. A altas velocidades ya no se siente tan firme debido al esquema de suspensiones, que prioriza el uso urbano de nuestras calles. Y se escuchan más los ruidos de viento y rodamiento.

Mantiene el sistema Start & Stop, que apaga el motor cuando nos detenemos en un semáforo para reducir el consumo. En ciudad y con aire acondicionado, puede rendir más de 10 km/l. En ruta, alcanza 15 km/l a 120 km/h constantes.

Seguridad 

En este ítem, el Chevrolet Cruze LT AT dispone de seis airbags, ABS, ESP y sistema de monitoreo de presión de neumáticos. También anclajes Isofix y alerta de olvido de objetos en asientos traseros, muy útil para quienes son padres y obligatorio en cada vez más mercados. 

Eso sí, no dispone de ninguna ayuda a la conducción, como alerta de punto ciego, mantenimiento de carril o frenado autónomo de emergencia. Solo la ofrece la versión Premier, tope de gama.

Precio 

Si hablamos de precios, vamos a entrar en un terreno que, aunque trillado, no deja de ser actual. La disparidad y los impuestos internos hacen que se “encimen” todas las versiones. De lista, la diferencia con el RS, por ejemplo, es de menos de 70 mil pesos. 

Este Chevrolet Cruze LT AT 5P vale 3.362.900. Nos consta que los sobreprecios siguen a la orden del día en los concesionarios y logran separar esa diferencia entre las distintas configuraciones. Pero, al ser un vehículo nacional, no tiene los mismos problemas de disponibilidad que los importados, cuya espera se mide en meses.

Dicho esto, este Cruze argentino ya es un rara avis en el mercado. Como decíamos en la prueba del LTZ, la oferta de medianos hatcbacks de cinco puertas cambió totalmente. Ya sin rivales directos (primero Focus y Golf, y luego Peugeot 308), la competencia es ahora con los SUV, pero del segmento B. 

Garantía

La garantía oficial de Postventa Chevrolet para el Cruze en todas sus versiones y niveles de equipamiento es de 100.000 kms o tres años, lo que suceda primero. La lista total de equipamiento y los precios vigentes se encuentran en su web.

Nos encantó del Chevrolet Cruze 5 LT AT

Incorporación de caja automática en versión de entrada

Confort de marcha

Prestaciones del motor turbo y consumo 

Conectividad wifi y OnStar

Relación precio (de lista) – producto

No le perdonamos al Chevrolet Cruze 5 LT AT

Faltantes de equipamiento y sin ninguna ayuda a la conducción 

Acceso a las plazas traseras 

Capacidad de baúl

Rueda de auxilio temporal

Insonorización en altas velocidades

Por Federico Smith

Periodista y locutor. Conduzco en Radio Del Plata (AM 1030) de lunes a viernes 6AM, hablo de autos en Radio con Vos (FM 89.9) los sábados 10AM y soy Editor de Motorweb.

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