Prueba: Renault Logan 1.6 16v Privilege

La vuelta de pagina del Logan es posiblemente uno de los casos de cambios mas llamativos en los últimos años entre una generación y la siguiente en nuestra región. Si repasamos un poco la génesis de como había nacido el primer Logan en el Viejo Mundo, bajo la marca rumana Dacia y con la promesa de costar al publico solo 5.000 Euros, entenderemos que el termino «low cost» no solo se refería a un auto de terminación muy austeras y una relación precio/tamaño mas que conveniente, si no que en la ecuación también entraba el diseño y el desarrollo. Basado en la plataforma «B0», el anterior Logan era un auto de aspecto anónimo y diseño básico. Sumado a la simpleza general del modelo, la ecuación no era de lo mas cautivante para el publico, salvo para quienes compraban por el bajo precio y la relación costo/habitabilidad. El Logan pertenece al segmento B, pero es de esos autos que comenzaron a crecer en tamaño, ofreciendo mas capacidad por la misma plata.

Esta nueva evolución, que modifica la plataforma anterior y que pasa a denominarse «M0», ya cuenta con una carta de presentación diferente: lisa y llanamente, el auto es lindo. Ya no es cuestión, entonces, de comprar se el mas grande por la menor plata, si no ademas también poder «defenderlo» desde la elección voluntaria y por gusto. Se sabe, las razones objetivas pueden decidir la elección de un bien por sobre otros competidores, pero pocos argumentos pesan tanto como un «me gusta más». Y así llegamos al análisis de este nuevo Logan, un auto que pasó a ser del patito feo de su franja a ser el mas atractivo entre sus competidores.

Las lineas exteriores del nuevo Logan son mucho mas actuales y expresivas. Con una trompa muy lograda (que veremos en breve también en los próximos Sandero y Stepway), que ostenta la nueva identidad de Renault con el rombo saliente y bien grande, el resto de la carrocería acompaña el diseño aunque no tiene la personalidad de la trompa. Ojos entrecerrados pudimos ver rasgos del Citroen DS 3 en los faros traseros y la nervadura del panel de 3/4 traseros, que abraza la manija de la puerta trasera tiene un aire al mismo rasgo que vemos en el Chevrolet Cobalt, competidor directo del Logan.

Con 4.35 metros de largo, el Logan es 6 centímetros mas largo que su antecesor. Estos centímetros extra están principalmente en los voladizos, ya que el largo entre ejes resta prácticamente invariado, haciendo gala de la misma gran habitabilidad de la cual ya gozaba la generación anterior. En el ancho y la altura total no hay cambios sustanciales.

Adentro, también son todas mejoras para el Logan. Ahora el planteo es mucho mas homogéneo y su diseño es mas esmerado. Aun conserva algunas soluciones típicas de los autos destinados al tercer mundo, como los comandos de los levantacristales delanteros desfasados de los traseros, unos en el apoyabrazos de la puerta del conductor y los de los traseros, en la consola central bajo el climatizador. La tecla que acciona el control de velocidad crucero/limitador de velocidad máxima también está en una posición rara en la misma consola, en vez de estar mas a la mano, cercana al volante, por ejemplo. Esto es clásico de autos «low cost», que priorizan concentrar los comandos y sus cableados en la plancha principal para minimizar recorridos de materiales y complejidades extra en pos de bajar el costo de fabricación. No es lo ideal, peor tampoco es fundamental.

Por el resto, no hay nada mas que objetarle al nuevo Logan, a excepción de que le faltan algunos plásticos que podrían recubrir, por ejemplo, las guías de los asientos delanteros, muy (demasiado) visibles en el piso entre las butacas delanteras. Por supuesto, como todo auto de su segmento mercosur, los plásticos son todos rígidos, aunque de buen aspecto. La tapa de la guantera se la percibe como demasiado fina y da la impresión de ser endeble, pero al menos es bien amplia y tiene luz de cortesía.

La posición de manejo es buena, y uno va sentado bastante arriba. Por suerte la butaca del conductor tiene regulación en altura y la columna de dirección también, aunque no en profundidad. La disposición de los comandos, ademas de lo ya mencionado es racional y queda todo cómodo. En tren de pedir mas, un apoyabrazos central para el conductor, aunque sea de esos pequeño y rebatibles que van contra el lateral de la butaca, no vendría nada mal en viajes largos.

El habitáculo de esta versión Privilege tiene bueno detalles de equipamiento,  como la tapicería y los plásticos en dos tonos contrastados de gris, climatizador automático de una vía, cinturones de seguridad y apoyacabezas delanteros ambos regulables en altura, volante forrado en cuero con controles al volante del control de velocidad crucero, comando satélite de audio, apertura interna del baúl  (aunque falta algún botón externo, de afuera solo se abre con la llave) y del tanque de nafta, computadora de abordo, que se conjuga con el sistema  de Calificación de Conducción ECO2, utilizable desde el nuevo MEDIA NAV y su pantalla de 7 pulgadas. Todas las teclas levantacristales en cada puerta están correctamente iluminadas de noche.

Exteriormente ofrece espejos retrovisores con comando eléctrico y luces de giro incorporadas a éstos, sensores de estacionamiento, que parecen agregados a ultimo momento en concesionario, puesto que no son pintados del color de la carrocería. Sin dudas un simple detalle a mejorar que agradecerán quienes elijan su Logan Privilege en colores claros. El sistema Media Nav ofrece, ademas del monitoreo de la conducción, reproducción de audio por USB, entrada mini-plug, Navegador con GPS (un diferencial en este segmento), telefonía manos libres por Bluetooth. El Logan nos debe algo tan simple como el sistema «one touch» de levanta-vidrios eléctricos, un ítem de confort que quienes usan seguido los peajes de ruta extrañaran sobremanera.

A nivel seguridad, el Logan que probamos es el mas completo de la gama (a excepción del tapizado de cuero para el Privilege Plus), y ofrece doble airbag frontal con frenos antibloqueo ABS, como el resto de la gama Logan que ya cumplen con la nueva reglamentación que los hace obligatorios para todos los 0km a partir del 1 de Enero de 2014. Tiene 5 apoyacabezas, uno para cada ocupante homologado del vehículo, pero adolece del típico faltante de los autos Mercosur del segmento B: no hay un tercer cinturón inercial de 3 puntos para el pasajero que viaje en el medio del asiento trasero, una omisión ya imperdonable a esta altura….. si uno tiene tres hijos, en el medio sentás al que menos querés?

No encontraremos ganchos de tipo ISOfix en las plazas traseras para las sillas infantiles mas modernas y eficientes. Tampoco hay faros antiniebla traseros, solo delanteros. Hay que tener presente que no solo es bueno ver, si no también ser visibles en la niebla! Incluye luces de marcha diurna, con lamparita halógena, que es la misma lampara de posición, pero con doble filamento. Durante el día, a luces apagadas, las mismas permanecen encendidas a máxima potencia. Ideal para ser visto todo el tiempo, aunque la legislación vial argentina aun no contemple este ítem.

La habitabilidad del Logan es uno de sus mejores atributos. Amplio, con un conductor de 1.88m de altura pudimos viajar sentados detrás de el y aun midiendo 1.75m de altura quedaban algunos centímetros de aire entre mis rodillas y el respaldo anterior.  Cuatro adultos grandes podrán viajar con comodidad y 5 adultos de talla normal también podrán enfrentar un viaje largo sin temor a estar muy apretados. El baúl, de capacidad pantagruelica con 510 litros acompañará para que entren todos los bolsos y valijas de los ocupantes. Si ademas se requiere mas espacio de carga, se ofrece respaldos traseros rebatibles en proporciones de 1/3 y 2/3 del respaldo -o también completo, por supuesto-. El baúl, si bien es enorme podría estar un poco mejor presentado.

Mucha chapa a la vista, algunos cantos medio filosos y herramientas para el auxilio mecánico a la vista, no suman a la presentación del baúl. Es tal vez la parte «más low cost» del nuevo Logan, donde menos esmero de terminaciones hay.  Lo de las herramientas fijadas a los lados del baúl es un poco incomprensible, visto que debajo del piso, en el alojamiento de la rueda de auxilio (de tamaño real en 185/60, aunque de chapa), hay mucho espacio de sobra como para estos elementos no se mezclen con el equipaje. También tiene las criticadas bisagras intrusivas que, al no correr dentro del algún carenado, podrían dañar el equipaje. A prestar atención entonces al posible recorrido de las bisagras si se llegara a cargar mucho el baúl. Por otro lado, los usuarios  profesionales del Logan agradecerán el enorme baúl para alojar el cilindro de GNC sin penalizar tanto la posibilidad de llevar equipaje.

El andar del Logan o podremos separar en dos capítulos marcadamente distintos. El uso urbano, donde el auto se comporta de modo confortable y sereno, y el rutero, donde se pone celoso a los vientos laterales y a las calzadas irregulares a velocidad elevada. En ciudad, si tenemos los neumáticos correctamente inflados como indica el manual, obtendremos buen confort de marcha. Atención a no inflar las cuatro ruedas por igual, ya que con 35 libras -como por ejemplo recibimos nosotros la unidad- el tren trasero se pone rebotador. El manejo urbano es agradable y sin esfuerzos, salvo cuando se estaciona, donde la dirección se pone particularmente pesada pese a ser asistida. En rutas abiertas, si nos mantenemos por debajo de los 120 km/h, el Logan tiene un buen desempeño. Pero si lo apuramos y subimos la velocidad, requerirá mas atención, con la impresión de que hay que corregirlo constantemente. No es amigo de las rutas ventosas.

El motor del Privilege es el K4M, con tapa de 16 válvulas, que ya conocemos del Megane y del Clio. Desarrolla en esta revisión unos 105cv a 5750rpm  tiene un torque máximo de 148Nm a las 3700 rpm. Es un motor simple, rendidor, que no requiere estirar los cambios mas allá de las 4500 rpm, ya que por mas que la potencia esté bien arriba, el máximo torque lo encontramos a menos de 4000 vueltas. A mi entender, en esta franja de autos que normalemente son utilizados profesionalmente, es una contra que la distribución se a correa en vez de a cadena. El comando de caja, exclusivamente manual y de 5 velocidades para todas las versiones, es agradable. Podría tener los recorridos un poco mas cortos y precisos, pero dado el perfil poco deportivo del modelo, no es un ítem a reclamar.

En ciudad se mostró ágil en los primeros cambios y bastante elástico. En ruta en cambio es domestico y no ofrece prestaciones sorprendentes. Da lo que tiene que dar para su segmento. El consumo en ciudad, nos dió registros de 11 litros cada 100 kilómetros recorridos, mientras que si circulamos constantemente en ruta a 130 km/h el valor baja a 8.2 litros cada 100.  A ese velocidad, el motor gira a 3800 rpm, lo cual eleva ciertamente el sonido del motor que se cuela en el habitáculo. Sin dudas, una caja de marchas de 6 relaciones le vendría mucho mejor. Muy buena la presentación del motor, opuesta a la del baúl, ya que ofrece amortiguador elevador y manta interna insonorizadora, elemento pocos comunes en su clase.

Para quien es este nuevo Renault Logan? Sin dudas es para aquellas familias que necesiten espacio a precio relativamente contenido. Es de mecánica conocida y confiable, consume razonablemente y tiene un buen equipamiento de confort. Es una gran avance a todo nivel para quienes vengan del Logan anterior o de otros modelos mas antiguos. A partir de esta nueva generación, el Logan adquiere también el beneficio de un diseño agradable y atractivo, escapándose del aspecto simplón de la generación anterior. Tendrá que vérselas con competidores que salieron al mercado también hace poco, como los Chevrolet Cobalt y Prisma, el Fiat Grand Siena, y otros que no tanto, como el Volkswagen Voyage y el Peugeot 207 Compact, entre otros. Pero el Logan posiblemente es el que mejor relación precio-producto ofrece por ahora y con equipamientos de confort exclusivos. Solo el Grand Siena se le adelanta en el rubro seguridad con el opcional de los airbags laterales delanteros, únicos en su segmento.

La gama Logan tiene cinco versiones y la garantía es de 3 años 0 100.000 kilómetros. El precio de la version Privilege es de 123.100 Pesos al momento de la publicación de esta nota, y el Privilege Plus que suma tapizados de cuero trepa a 126.300 Pesos.

Que nos encantó del Renault Logan 1.6 Privilege:

• La mejora en diseño exterior e interior
• Motorización confiable
• Buen equipamiento de confort
• Habitabilidad para 5 pasajeros/ Amplio baúl
• Confort de marcha urbano

Que no le perdonamos al Renault Logan 1.6 Privilege:

• Faltantes en seguridad
• Algunas terminaciones descuidadas
• Rumorosidad del habitáculo a velocidad
• Estabilidad a altas velocidades
• Dirección pesada en maniobras

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