Entre las varias marcas presentes en el Salón de Frankfurt 2011 que exponían novedades de interés para el mercado argentino, Toyota presentaba la renovada pick-up Hilux, con el restyling de media vida que debería llegar en pocos meses más a nuestro mercado.
Lanzada por primera vez en Japón en 1967, y un año más tarde en toda Europa, la Toyota Hilux ha ejercido una presencia dominante en el mercado mundial de pick-ups durante casi 45 años. Ahora, con el surgimiento de nuevos competidores, la Hilux intenta ponerse al día para no perder ventas.
Hasta la fecha, la pick-up ha alcanzado unas ventas globales acumuladas de más de 13 millones de unidades. El año pasado, las ventas llegaron a las 549.000 unidades en todo el mundo, lo que supone un incremento del 25% con respecto al año anterior. En Europa, se vendieron 21.866 Hilux en 2010, lo que representa cerca del 25% del total del segmento, y pone el pick-up de Toyota a la cabeza por tercer año consecutivo. La nueva pick-up estará disponible en 36 países europeos, y en más de 135 países de todo el mundo.
Tanto el diseño interior como el exterior del Hilux 2012 se han renovado extensamente. Los cambios del interior incluyen una mayor calidad percibida en todo el habitáculo, así como una comodidad similar a la de un auto. Un nuevo cuadro de mandos central horizontal refuerza la amplitud y el espacio del habitáculo. El cuadro central está dividido claramente en dos secciones. La parte superior incorpora una unidad multimedia con pantalla táctil Toyota Touch de 6,1”, que supuestamente también estará disponible en Argentina, según nos han informado algunas fuentes. La parte inferior integra nuevos diseños para los controles del aire acondicionado y el climatizador automático. El cuadro de mandos del conductor se ha rediseñado para potenciar la claridad de los indicadores, y las versiones más completas cuentan ahora con indicadores Optitron. El volante, con un nuevo diseño más moderno, incorpora el cambio de marchas en función de la versión.
La calidad percibida se ha mejorado considerablemente gracias a la adopción de unos acabados uniformes más oscuros, con una mayor coherencia de colores en el interior. Esta sensación de mayor sofisticación aumenta gracias a la nueva ornamentación cromada de la pantalla del equipo de sonido, el volante y la palanca de cambio de marchas. Una gama de tres tapicerías distintas, incluida una de piel, ofrece una mayor durabilidad y más diferenciación entre las versiones. El frontal del vehículo es totalmente nuevo desde los pilares A hacia delante. Las líneas fluidas del nuevo diseño del capot se alargan hasta la nueva rejilla del radiador, más sofisticada, en forma de trapezoide invertido. La rejilla está flanqueada por unos grupos de faros que se proyectan más allá de los extremos de la carrocería para mejorar la visibilidad de los intermitentes. El nuevo diseño del paragolpes delantero incorpora una gran entrada de aire flanqueada por unos faros antiniebla integrados.
De perfil, la limpia y robusta carrocería del Hilux 2012 se potencia con el nuevo diseño de los guardabarros delanteros y traseros, que incorporan una marcada línea de carácter que fluye hacia atrás y añade una viva sensación de movimiento. El perfil del vehículo se potencia aún más gracias a las nuevas y robustas llantas de acero y aleación de 15”, y las deportivas de 17”, así como los nuevos retrovisores exteriores, con intermitentes integrados, eléctricos, plegables y calefaccionados en los modelos más completos de la gama. En la parte posterior, los nuevos grupos de faros combinados y una nueva luz de freno superior se suman al diseño saliente de los faros delanteros para maximizar la visibilidad.
También como novedad, aunque no para Argentina, estaba la nueva generación del Toyota Yaris. El compacto del segmento B, fabricado en Francia, es la tercera generación del exitoso modelo que comenzó a venderse en Europa en 1999. El nuevo Yaris competirá en el segmento B, que —con una cuota del 26 % del total del mercado, lo que supone unas ventas de unos 4 millones de vehículos al año— sigue siendo uno de los escenarios de ventas más importantes del mercado automotor europeo. Actualmente, este segmento está dominado por vehículos con motor naftero, que representan más de dos tercios del total.
En los últimos años, se ha acelerado la diversificación en el segmento B, a raíz de la introducción de nuevos tipos de modelos, como el todoterreno y el monovolumen B. Sin embargo, la carrocería cinco puertas, que representa el 50 % del total de las ventas, sigue siendo la carrocería más importante y más vendida. Según el comunicado de prensa de la marca : «El nuevo Yaris estará disponible con tres opciones de motor: motores de gasolina VVT-i de 1.0 y 1.33 litros y turbodiesel D-4D de 1.4 litros. La unidad a nafta de 1.33 litros puede combinarse con la más reciente transmisión variable continua (CVT, Continuously Variable Transmission) de Toyota, «Multidrive S», mientras que en las versiones diesel 1.4 D-4D del nuevo Yaris existe la opción de una transmisión manual automatizada «ConfortDrive».
El motor naftero VVT-i de 1.0 litro y 3 cilindros de Toyota, una maravilla de la miniaturización, ha liderado la tendencia a la reducción de tamaño. Aún hoy sigue siendo un referente de ingeniería compacta y eficiente. Esta unidad, la más liviana de su categoría, ha obtenido durante cuatro años consecutivos (2007-2010) el premio al Motor del Año en la categoría de menos de 1.0 litro. Equipada con una transmisión manual de 5 velocidades, la nueva versión de la unidad de 998 cc genera 51 kW / 69 CV DIN a 6.000 rpm, y un par máximo de 93 Nm a 3.600 rpm. El consumo de combustible, líder en la categoría, se ha reducido un 4 %, hasta los 4,8 l/100 km. Este motor de 1.0 litro se fabrica en Europa, en Toyota Motor Manufacturing Poland.
Los modelos Yaris equipados con el motor de gasolina VVT-i dual de 1.33 litros pueden incorporar una versión mejorada del sistema Stop & Start de Toyota. En combinación con la transmisión Multidrive S opcional da lugar a un consumo de combustible de 5,0 l/100 km y unas emisiones de CO2 de solo 114 g/km, mientras que con la transmisión manual son 5,2 l/100 km y 120 g de emisiones CO2. El sistema, que incorpora un rearranque inmediato sin apenas ruido del motor ni vibración, presenta una reducción de CO2 considerable en la conducción urbana, y puede reducir el consumo de combustible hasta en un 10 %, en función de las condiciones de la conducción.
El sistema Stop & Start apaga el motor automáticamente cuando el vehículo está parado y se engrana el punto muerto, o se pisa el pedal de freno en el caso de la transmisión Multidrive S. El motor volverá a arrancar automáticamente en menos de medio segundo al pisar el embrague o soltar el freno, respectivamente. Esa rapidez para volver a arrancar es posible gracias al uso, por primera vez en el mundo, de un mecanismo de engranajes permanentemente embragado, donde el motor de arranque y el volante se conectan, a través de un engranaje anular, por un embrague unidireccional. Este potente sistema, que no requiere mantenimiento, reduce los niveles de ruido del arranque del motor en el habitáculo, así como los niveles de vibración de los asientos.»
No hay planes de que veamos al Yaris por Argentina, lo cual es una verdadera lástima. Es un auto moderno, espacioso, de muy buen diseño y calidad. Justo lo que necesitaría Toyota en el Mercosur para participar en el nutrido segmento B, donde hoy no tiene ninguna oferta.