El 208 llega a nuestro mercado con una doble tarea, y con grandes ambiciones. Deberá volverse el modelo mas deseado de su segmento, como sucedió hace 14 años atrás con el 206, y ademas, deberá conseguir excelentes volúmenes de ventas, como también logró su antepasado, el 206 y el 207 Compact. Al menos, estas son las premisas que marcó Peugeot Argentina para este modelo, que sale a la venta en nuestro país apenas a un año de lanzarse en el viejo continente. Se trasforma así en uno de los pocos y mas modernos referentes del Segmento B regional, y mas puntualmente en el nicho comúnmente llamado «B+» o «B Superior», que están a la par de lo que se vende en Europa. A cada nueva generación de un modelo suele haber un crecimiento en tamaño. No es el caso del 208, que es mas chico que el 207 que acá solo supimos tener en versiones deportivas (RC y GTI) y Cabrio (CC). Mide 3.96 metros de largo, y establece una reducción de casi 9 centímetros respecto al 207 europeo y un crecimiento de unos 8 centímetros respecto al 207 Compact.
Tiene un exterior de diseño novedoso, pero que a la vez retoma algunas redondeces, sobretodo el la cola, que lo remiten al originario 206, dejando de lado el mas aburguesado y grandote 207 europeo. Su trompa incluye la nueva parrilla de Peugeot, que ya vimos en el 508, y en el renovado RCZ. La cola muestra faros con un curioso diseño que se extiende hacia los laterales del auto en forma de herradura, motivo que podemos encontrar mas suavemente en el Crossover 3008. Los faros traseros, la forma de la luneta y el paragolpes con el faro antiniebla en posición baja y central, nos remiten automáticamente al 206.
La trompa del auto es mas original, o menos continuista si se quiere, aunque a nuestro gusto es tal vez un poco rebuscada en complejidades superficiales, con bastantes nervaduras, entrantes y salientes. Los laterales también presentan sus particularidades estilísticas, con todo el plano de ventanas remarcado por un inserto metalizado, que remata con una falsa ventanilla ciega en el montante C. En el extremo delantero, en el vértice de donde sale el retrovisor, tiene un escalonamiento de la linea de cintura que también marca una diferencia estética y la silueta del aventanamiento lateral se dibuja mas allá del montante del parabrisas.
Si lo miramos desde arriba, el gran plano del techo fijo acristalado «Cielo», con un inserto metalizado que divide este ultimo del parabrisas,ofrecen una gran superficie vidriada, que se destaca mucho en colores de carrocería claros. Ademas de la renovación del diseño del logo del León, la marca ha tomado el rumbo de volver a estamparle el nombre PEUGEOT a su nuevo modelo, no solo en la cola a la base de la luneta, si no también en la trompa, por sobre la parrilla.
El resultado de todos estos detalles de diseño es un aspecto sumamente personal, que difícilmente será confundido con un auto de otra marca y que logra, al menos a nuestro entender, revalorizar ciertos aspectos de diseño que se venían utilizando en Peugeot en los últimos años, pero inyectándole una dosis de novedad y reformulación de la estética de la marca. Luce agresivo y actual. El aspecto de este 208 es el de un auto solido y bien plantado. Equipado en esta versión «Feline Pack Cuir» con llantas de 16 pulgadas de muy lindo diseño, el auto «cierra» visualmente por todos lados a nivel proporciones. Las 4 ruedas están dispuestas bien a los extremos de la carrocería, no solo haciéndolo muy moderno al ojo, si no también mas habitable y con muy buenas cualidades dinámicas, como veremos mas adelante.
Puertas adentro, el 208 se trae una pequeña revolución con el «i-Cockpit». Muchos ya me han comentado sobre lo raro que se ve el clúster de los relojes del tablero en posición retrasada y con un volante pequeño en posición muy baja. Ademas, hay un display táctil de 7 pulgadas (en las versiones mas equipadas) que en contraposición, se acerca bastante al conductor y se eleva, como saliéndose de la plancha para quedar siempre a mano y a la vista. Estas son las dos particularidades mas llamativas del interior del 208, y que, por mas raras que parezcan en las fotos, se revelaron extremadamente practicas e intuitivas con el uso.
El tablero retrasado está ubicado lo mas alto posible y tiene la peculiaridad que se miran los instrumentos por encima del aro del volante y no a través de este ultimo, como sucede en la mayoría de los autos modernos. Esto obliga a dos soluciones derivadas: primero, que el volante tenga un diámetro total menor, que quede por debajo del clúster, pero que no oprima a las piernas; y ademas, al reducir el brazo de palanca del volante, la dirección debe ser de tipo eléctrica, con asistencia perfecta y variable según la velocidad del auto para facilitar cualquier maniobra. Completa esta situación un grip de volante «gordito», como mas nos gusta.
El cuadro de relojes es mixto, es decir, dos relojes medianos de agujas para velocímetro y cuentavueltas, complementados por medidores digitales (por segmentos iluminables, sin agujas) para temperatura de motor y nivel de combustible. En el centro, un display muestra la velocidad en formato digital, ademas de las informaciones de la computadora de abordo. Se completa todo con variados testigos luminosos. Ademas, los datos de la computadora de abordo se replican -si uno quiere- en el display central de 7 pulgadas. El conjunto del clúster funcionan entonces como un gran «Head-Up Display» (como se inventó para los aviones de combate) y queda siempre en el campo visual del conductor muy cercano al camino. Es muy practico realmente.
La pantalla multimedia de 7 pulgadas de la consola central merece un párrafo aparte. Se lleva gran parte del protagonismo interior y es del tipo táctil, con un muy buen software, adecuada respuesta y facilidad de uso. Bastante mejorado respecto a versiones anteriores como por ejemplo la del 308/408. Desde aquí se pueden manejar configuraciones del vehículo, ver datos de la computadora de abordo, dominar el completo sistema de audio, que tiene 4 parlantes y 2 tweeters, y que reproduce mp3, tiene entrada USB y Aux con un mini-jack, radio AM/FM.
No ofrece lector de CD, algo que comprendemos lógico ya que ha perdido cierta practicidad dentro del auto frente a otros «soportes» digitales. Ademas, se puede levantar audio mediante Bluetooth con el sistema de audio-streaming, que permite reproducir lo que tengamos alojado en un celular, un Ipod o cualquier otro aparato que tenga Bluetooth. El sistema cuenta con comandos en el volante para comandar el audio y también la telefonía celular. Es muy cómodo también como el sistema toma la agenda de nuestro teléfono y la integra al display, haciendo muy practica la operación del teléfono a través de la pantalla táctil. Completa el equipo multimedia la navegación por GPS, con mapas mas acertados. completos y de mejor lectura que en otras versiones anteriores de Peugeot.
La atmósfera en el interior del Peugeot 208 está muy lograda. La marca insiste en su lema «el camino a la alta gama» y realmente esa intención se siente en el 208. Es mas, me sorprendió mucho como está terminado el auto por ser la versión Mercosur. Está fabricado en la planta de Río de Janeiro de PSA, y sinceramente, como toda adaptación de producto europeo al Mercosur, me esperaba una simplificación mayor. En cambio me encontré con un modelo bastante bien terminado, como con muy buenas intenciones y atención al detalle. Hay algunos plásticos que en la versión europea son mas «amables» al tacto y en nuestros 208 se ven mas rígidos, pero nunca notamos en los casi mil kilómetros que lo usamos que se manifestaran grillitos o crujidos. El tiempo dirá si se mantienen así. Decíamos que hay muy buenas intenciones de terminación y es en estos detalles donde uno también ve la diferencia con otros productos.
Desde la manija exterior para abrir el baúl, pasando por el soporte en el habitáculo para el matafuegos, los 3 cinturones traseros inerciales de 3 puntos con sendos apoyacabezas, los detalles en plástico color aluminio satinado brillante que abundan en el interior y que parecen sacados de un auto de mucho mas precio, más una larga lista de «amenities» de confort nos dan la pauta que Peugeot ha querido lograr un producto con cierto grado de sofisticación extra respecto a lo que es el segmento en nuestra región. La versión que probamos es la mas cara y completa de la gama y creo que con la larga lista de equipamientos ofrecidos solo podría quejarme de dos faltantes de seguridad, como los ganchos ISOfix traseros para sillitas infantiles y la falta del control de tracción y estabilidad ESP. Es una pena que Peugeot, justamente con su proyecto de marca basado en el «Camino a la Alta Gama» no hay incluido el control de estabilidad en el equipamiento de seguridad. Si hay algo que hoy puede diferenciar a la alta gama, es la superioridad en seguridad activa y pasiva. Pero por el resto, no se le puede pedir mas al 208.
La versión Feline Pack Cuir agrega al generoso equipamiento del Feline, los tapizados en cuero parcial, que cubren los laterales de las butacas dejando la parte central en tela, los airbags de cortina, que se suman a los frontales y laterales delanteros de tórax, disponibles ya desde el segundo nivel de equipamiento de la gama 208, más unos umbrales decorativos de las puertas terminados en acero inoxidable. Entre el equipamiento que aun no mencionamos podemos sumar el control de velocidad crucero, el limitador de velocidad, el climatizador automático de doble zona, el encendido automático de luces y limpiaparabrisas, los sensores de
estacionamiento delanteros y traseros, que tiene alertas acústicas y se visualiza también en el display central, iluminación del habitáculo en leds, guantera refrigerada con luz, alarma volumétrica, cierre centralizado con comando remoto desde la llave, que es del tipo navaja y permite también desde allí encender las luces bajas para asistirnos en zonas muy oscuras, etc. Hasta incluye el kit de matafuegos, el kit de seguridad en el baúl y los bulones antirrobo para las ruedas, coquetamente cubiertos con un embellecedor cromado. Sin dudas es mas que completa la dotación de accesorios!
La posición de manejo es fácil de lograr en el 208 gracias a sus múltiples reglajes. La butaca sube en altura y la columna de dirección se mueve en altura y profundidad. Los asientos parecen duros en primera instancia, pero se mostraron muy confortables a los largo de los muchos kilómetros que recorrimos. No comparto la solución Peugeot a la regulación del respaldo de las butacas que se hace mediante una palanquita ya desde al época del 206. La rueda reguladora es una solución mucho mas precisa y cómoda de operar. Dispone de apoya brazos central (rebatible), que ademas contiene un portaobjetos en su interior. Está ubicado un poco alto y para algunos conductores puede resultar molesto para operar la caja de velocidades. Otro buen detalle de terminación: adentro del apoya brazos hay una alfombra de goma con textura antideslizante y antiruidos. Un recurso que no suele verse seguido en productos Mercosur.
En las plazas traseras, si bien es mas amplio que un 207 Compact, si el conductor es muy alto (digamos, mas de 1.85m), el espacio para las piernas atrás se verá comprometido. Pero no es nada que no sea común en el segmento B. Regulada la posición de manejo para alguien de 1.75m de altura como yo, en la plaza trasera se puede viajar con comodidad teniendo la misma altura. Llama la atención que e auto no tenga ni una sola agarradera de techo para ninguna plaza. Posiblemente se deba a que con el techo «Cielo» y su doble cortina (de accionamiento manual), sumado a la redondez de la carrocería, no dejan prácticamente lugar para que quepan estas manijas y no terminen tocando contra la cabeza de los ocupantes.
Las puertas tienen doble burlete, y esto seguramente colabora a la muy buena insonorización del habitáculo, sin dudas otro plus en este segmento, donde la insonorización no suele ser una virtud regional en los autos chicos. En la ciudad, su suavidad de marcha y la buena insonorización realmente crean un muy buen ambiente interior. En ruta, a elevadas velocidades, la situación no es tan alentadora pero igual sigue estando por encima de sus rivales.
Esta versión cuenta con un motor 1.6 litros de 16 válvulas y 115cv que Peugeot llama «EC5». Fue presentado hace poco cuando se lanzó el 308 y también equipa a su primo el Citroën C3. Es una revisión/optimización del anterior motor 1.6 que rendía 110cv, solo que ahora logra mejor erogación del torque y menores consumos. Su funcionamiento es sereno y logra sacarle buenas reacciones a los 1173 Kilos del 208 Feline. Tiene un torque máximo de 152Nm a las 4000rpm y está combinado únicamente con una caja manual de 5 marchas.
La caja está bien relacionada, pero como en muchos otros productos de PSA, el selector es de accionamiento poco preciso, con recorridos largos, que no la hacen una caja de velocidades de manejo muy placentero. No obstante ello, su manejo es siempre ágil y el auto responde bien en todos los cambios. El motor, pese a tener el máximo torque desde las 4000rpm, se maneja con soltura en la parte baja del cuentavueltas y se siente muy elástico. El consumo es bueno, con 9.3 litros cada 100 kilómetros en ciudad y unos 8 cada 100 en ruta. A 130 km/h constantes, la máxima en autopistas y rutas, el motor gira a 3600rpm en quinta, consumiendo unos 7.4 litros cada 100km.
El andar del 208 es confortable y todo el auto está dirigido a ese aspecto. Desde la elección de neumáticos Michelin Energy Saver en medida 195-55 hasta los mencionados burletes dobles, se presenta como un auto que conjuga muy bien un confort de marcha urbano con una tenida de ruta muy buena. Gracias a que las cuatro ruedas están bien a los extremos del chasis, el 208 es un auto que circula aplomado en curvas, incluso bajo exigencia. Tuvimos la oportunidad de meterlo en el Autódromo El Pinar de Montevideo y pudimos comprobar las bondades de un chasis y unas suspensiones muy bien logradas. A veces, es difícil lograr el equilibrio, pero en el 208 existe. Hablamos por supuesto de un uso absolutamente domestico y sin aspiraciones deportivas (para ello ya llegarán los 208 GTI y 208 XY importados, hacia finales de año), pero quien use el 208 en algún camino de las Sierras por ejemplo, con curvas y contracurvas, notará un comportamiento muy superior al del 207 Compact.
Digamos entonces que tiene un tren rodante bastante bien logrado pese a tener suspensiones traseras con eje rígido, lejos de la sofisticación de una suspensión trasera independiente. Los ingenieros de Peugeot trabajaron en la adaptación del 208 al Mercosur, elevando solo 10mm el despeje de las suspensiones, y el resultado es un auto urbano que puede desenvolverse perfectamente en ciudad, con la aspereza de nuestras calles, y a la vez circular cómodamente en curvones veloces.
A nivel seguridad el Peugeot 208 en esta versión, al Feline Pack Cuir, sobresale frente a sus rivales de franja Mercosur. Contra el único que no puede competir en este apartado es con el Ford Fiesta Kinetic que llega de México, que ofrece un nivel de seguridad inédito para el segmento B en estas latitudes. De todos modos, el 208 con sus 6 airbags, frenos con ABS y Repartidor Electrónico (REF), 5 cinturones de seguridad inerciales con su respectivo apoyacabezas regulable en altura, faros antiniebla delanteros y trasero, más las luces de marcha diurna en leds, se posiciona en lo mas alto de la oferta regional. Una pena que con semejante lanzamiento luego de 14 años de no innovar en el segmento, Peugeot no haya incluido el control de estabilidad ESP o los ganchos ISOfix traseros para butacas infantiles. Pese a este «olvido», consideramos la oferta de seguridad muy buena, aunque siempre hay lugar para pedir mas o tiempo para que la terminal se decida a incorporarlo en algún momento.
Los frenos del 208 responden bien, pero no tienen buen tacto de pedal. Éste tiene una primera parte del recorrido algo esponjoso, que no da una sensación de contundencia al apretarlo. Pese a esto, los frenos respondieron bien, pero se extrañan los discos traseros que ya traían los 206 allá por el ’99 y que estiraban el agotamiento del sistema frente a reiterados abusos.
La capacidad el baúl del Peugeot 208 es buena: son 318 litros que se pueden ampliar rebatiendo los respaldos asimétricos de las plazas traseras. Todo el interior del baúl está muy bien terminado, con todas sus caras correctamente revestidas y conformando un volumen de carga regular, bien aprovechable. Por debajo del solido cubre-piso del baúl va alojado el auxilio, que es una rueda del mismo tamaño que las otras 4, pero con llanta de chapa. Hubiera sido genial encontrar un auxilio homogéneo también en este modelo de Peugeot. De todos modos, sin quejas sobre el espacio de carga del 208, se presenta mas que bien, está iluminado y su contratapa tiene manijas para accionarlo, así como una manija externa con botón de cerradura eléctrica. Un ejemplo de que en nuestra región si se pueden hacer baúles bien terminados. Demás terminales, por favor tomar nota!
En conclusión, para nosotros el nuevo Peugeot 208 sin dudas podrá repetir el éxito de la familia 206. Ágil, cómodo, bien armado y sumamente cuidado en su presentación y equipamiento, el Peugeot 208 1.6 Feline hará las delicias de quien busque un auto urbano, compacto, pero sin por ello resignar calidad, seguridad, diseño y buen comportamiento dinámico.
El precio del Peugeot 208 1.6 Feline «Pack Cuir» es de 133.000 Pesos, un valor un tanto elevado pero que se podría justificar con su gran cantidad de equipamiento y detalles. Su garantía, es de 2 años y está disponible en 8 colores de carrocería.
Que nos encantó del Peugeot 208 Feline Pack Cuir:
- Diseño
- Calidad General
- Comportamiento dinámico
- Esmero en los detalles
- Insonorización
- Equipamiento Generoso
- Posición de Manejo
Que no le perdonamos al Peugeot 208 Feline Pack Cuir:
- Falta Control de Estabilidad ESP
- No tiene ganchos ISOfix traseros
- Taco de la selectora de cambios /recorridos
- Pedal de freno «esponjoso»
- Precio elevado
Para mi es un gran acierto poner el instrumental en esa posición, imitando lo que hizo Honda con el Civic ya hace años. Pero deberían haber puesto el velocímetro solo digital y más grande, distribuyendo el resto de marcadores digitales de forma de ocupar menos espacio lateral y concentrar la vista del conductor en el centro.
Es buena también la ubicación de la pantalla con el navegador, bien arriba. Lástima que para eso tuvieron que ubicar mal las salidas de aire. El diseño ideal en ese sentido lo tienen el Civic y el Cruze, que tienen ambas cosas (pantalla y salidas de aire) bien arriba.
Y por último, que necesidad hay de inventar esa capacidad de baúl en un auto que no se vende por ese atributo? Los 318 litros no son VDA, de esa forma son 285, que por otra parte es correcto.
Saludos.
El peugeot 206 fue un gran éxito que se convirtió en un ícono de la marca. Difícilmente se vuelva a repetir. Peugeot, en este segmento, viene perdiendo mucho mercado.
A mi me gustan los autos con menos tecnología. Ahora parecen computadoras con ruedas.
Tiene muchas críticas. Por ejemplo aqui.
El techo de vidrio esta muy lindo hasta que te agarre una pedrada. Mamita!!!
El Ford Fiesta KD lo supera ampliamente, a mi entender.