El mes pasado Nissan presentó en Argentina la cuarta generación del SUV X-Trail, modelo que hizo debutar en el país a la tecnología e-Power. Con la nueva X-Trail tuvimos un breve contacto para conocer sus detalles en el evento de lanzamiento, aunque no era la única novedad a la que nos estábamos familiarizando: en esto entra a jugar el sistema de tracción integral e-4ORCE, que se adapta a cada tipo de suelo, con propulsión eléctrica.
Incluso su denominación ya deja entrever parte de sus ventajas. ¿Qué significa la denominación 3-4ORCE? La «e» representa la gestión de motor 100% eléctrica de Nissan, mientras que «4ORCE» se refiere a que la potencia del vehículo se efectúa en las cuatro ruedas.
e-4ORCE es el avanzado sistema de tracción total de dos motores de Nissan diseñado para sistemas de propulsión electrificados y totalmente eléctricos. Esta tecnología de Nissan se basa en tres áreas principales: control del motor eléctrico, control 4WD y control del chasis.
¿Cómo es el sistema de tracción e-4ORCE de Nissan?
Según Nissan el sistema e-4ORCE ha sido probado en condiciones extremas en todo el mundo y ha demostrado su capacidad para mejorar el rendimiento y la seguridad en cualquier tipo de situación. Recordemos que la potencia a las ruedas es entregada permanentemente por un motor eléctrico, que entrega su par de una manera mucho más progresiva de acuerdo a la aceleración suministrada. Es decir, sin elementos intermediarios, como una caja de velocidades.
Dicha disposición posibilita sentir la potencia del vehículo eléctrico y disfrutar de la experiencia de manejo electrificado. El par se distribuye hacia el eje delantero o trasero para maximizar el agarre de los neumáticos según las condiciones de la superficie del terreno y la situación del vehículo, mientras que el frenado se controla individualmente para cada una de las cuatro ruedas.
Gracias a este control preciso del sistema de dos motores y las capacidades de vectorización del par de frenado, el vehículo mantiene el rumbo correcto ya sea que el camino esté mojado, resbaladizo, o cubierto de nieve. La clave es la distribución equilibrada de la potencia del sistema de motor doble, que se puede ajustar en 1/10000 de segundo, considerablemente más rápido que los sistemas tradicionales de tracción total mecánica.
Asimismo otro de los beneficios pasa por lograr una conducción con un mínimo «hundimiento» longitudinal de la carrocería en desaceleración, gracias al fuerte frenado regenerativo. El cabeceo se suprime controlando el equilibrio regenerativo entre los ejes delantero y trasero. Esto se obtiene gracias al sistema de motor doble, que otorga un mayor nivel de captura de energía regenerativa que un sistema de motor único, optimizando la eficiencia del vehículo en cada oportunidad.