El Ford Ka de primera generación fue una verdadera revolución cuando se presentó en Europa en 1996, y más aún cuando llegó a nuestro mercado tan solo un año más tarde. Sus formas, tremendamente exóticas por entonces, no dejaban de llamar la atención, sin embargo con el tiempo nuestra vista se acostumbró a él, como todo auto de uso citadino. Pero claro, que en este caso un mecánico de Reino Unido fue más allá, y creo una verdadera bomba.

Se trata de un Ford Ka, al que le quedan muy pocas cosas originales. Es que el esfuerzo de varios años de trabajo conllevó a modificarlo empleando partes de un Audi S3, convirtiendo a este pequeño del óvalo en ni más ni menos que en un Ka «Quattro».

El hombre detrás de esta loca construcción es Wayde Evans, propietario del taller Mohawk Customs en Cowbridge, Reino Unido. El proyecto comenzó al unir la plataforma de un Audi S3 de primera generación a la carrocería de un modesto Ka. Amen de ser vehículos de segmentos diferentes, las distancias entre ejes de ambos modelos era distante en algo así como 67 milímetros, que no fueron una traba para mimetizarlos.

Quattro: Un Ford Ka con mucha ferretería

Esta modificación se logró empleando diferentes paragolpes para ensanchar y alargar la carrocería original, lo que es evidente ya con verlo a simple vista. Sin embargo se tratan de partes blandas, ya que recordemos que el Ka de primera generación contaba con esos típicos paragolpes envolventes que cubrían cada una de las ruedas.

Su propietario además usó piezas provenientes de los Street Ka y Sport Ka, las variante convertibles y deportivas de los Ka europeos, e incluyó ópticas con tecnología LED. A su vez en la parte trasera resalta la doble salida de escapes.

Mecánicamente este particular modelo está equipado con el conocido motor 1.8 de cuatro cilindros y 20 válvulas que equipó a diversos modelos del grupo, incluyendo a los Volkswagen Golf GTI. Sin embargo en el S3 rendía 222 caballos de fuerza, que fueron ampliamente superados en este caso, tras adoptar diferentes elementos de altas prestaciones y un turbo más grande. Así se logró llegar a los 427 caballos de fuerza.

En cuanto a la tracción se conservó todo lo proveniente del S3, incluyendo la caja de seis velocidades y el diferencial central Haldex, mientras que los frenos se tomaron de un Seat Leon Cupra, modelo semejante al S3, en todos los casos de sus variantes de primera generación.

Fuente: Carscoops

Por René Villegas

Periodista y fanático de los autos y el automovilismo desde que tengo uso de razón. Colaboré en las revistas Auto Plus y Parabrisas, y desde 2019 edito Motorweb Argentina.

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