En plena expansión de los combustibles alternativos y la movilidad eléctrica, Renault ha dado a entender que la tecnología Diesel tendrá una nueva generación en los próximos años. El objetivo de la marca es el de reemplazar al motor 2.3 empleado la conocida Renault Alaskan o Master, o bien en la Nissan Frontier, por un nuevo impulsor más compacto, de dos litros con turbo.
La empresa encargada de llevar el proyecto adelante se llama Horse, siendo Renault y la firma china Geely sus principales accionistas. Asimismo el desarrollo correrá por cuenta de Dumarey Group, una firma con base en Italia dedicada al desarrollo de tecnologías a gran escala. El nuevo motor de cuatro cilindros en línea será preparado tanto para vehículos con tracción delantera, como con tracción trasera.
En principio este nuevo impulsor será empleado para los vehículos comerciales del rombo, pero incluso su desarrollo también contempla a futuro su utilización con otros combustibles alternativos, como aquellos motores de combustión interna impulsados por hidrógeno.
Renault y un nuevo motor Diesel de 2 litros
El motor 2.3 litros que equipa a la Renault Alaskan y a la Nissan Frontier que se producen en Argentina tiene más de diez años de desarrollo, y nuevas tecnologías ponen de manifiesto la evolución motriz de sus rivales.
Es por ello que el desarrollo de este nuevo impulsor de dos litros, presumiblemente con la utilización de dos turbos gemelos, sea el reemplazo de este conocido motor que se produce actualmente en Europa y que es enviado a la planta de Santa Isabel para ser colocado en las camionetas de producción nacional.
Si bien Renault tiene como imagen de marca un futuro electrificado, su proyección a futuro continúa estando fijada en tecnologías más convencionales, ya que según directivos, «no existe una solución única para un futuro sostenible».