Prueba: Mercedes-Benz GLA250 4matic

Mercedes-Benz está decidida a ofrecer un producto para cada nicho del mercado, y para lograrlo, no hay segmento que no tenga una propuesta SUV o Crossover de la marca de la Estrella. Probamos a fondo y durante una semana el GLA250 4matic, y te contamos todo lo que sacamos como conclusiones sobre este particular producto. Con fotos exclusivas de Martín Lübel.

El Mercedes GLA es un derivado de la plataforma del Clase A, el primer modelo de la marca en ofrecer tracción delantera. Se trata mas bien de un «Crossover», es decir una mezcla entre un hatchback compacto y un «Sport Utility», una mezcla a mitad camino que cada día aparece como la opción mas versátil para el uso cotidiano. Estas pequeñas camionetitas, desde la mas simple de marca generalista hasta lo mas refinado tecnológicamente, como es el caso de este GLA, terminaron siendo las favoritas de una gran parte del mercado y es por eso que ningún marca quiere perderse una tajada de este nicho.

De lineas bulbosas, el GLA sorprende estilísticamente con un estilo en parte agresivo, en parte simpático. No encontramos a nadie durante nuestra semana de pruebas que no le gustara nuestra unidad. Su diseño se destaca con rasgos que hacen reconocerlo inmediatamente como un Mercedes. Las nervaduras alargadas sobre el capot, recurso que se retoma desde las gloriosas coupés «Alas de Gaviota» de los años 50’s, pasando por la gran parrilla deportiva que nos retrotrae a las grillas frontales de los Mercedes mas deportivos de finales de los 70’s e inicios de los 80’s y unos faros traseros que evocan a modelos mas recientes de la marca, terminan de componer la imagen de este Mercedes.

2015-06 TEST Mercedes GLA 250 Motorweb Argentina 019 Todos estos condimentos, «remixados» con superficies sinuosas que denotan la modernidad del concepto, resaltado por apliques plásticos, unos negros, unos color aluminio satinado que recorren los bajos de la carrocería, los pasarruedas y unos pequeñas insinuaciones de rieles portaequipajes sobre el techo, completan el «look» todo camino de este pequeño Mercedes. Perteneciente a la Clase A, la incorporación de la G en su nomenclatura responde al termino alemán «Gelände», que significa «terreno». Con las nuevas nomenclaturas de la marca (ver nota), todos los modelos que tengan condición de todo-terreno incorporarán la G en su nombre de Serie. Y el termino «4matic», en el mundo Mercedes, implica que estamos frente a un vehículo con tracción en las cuatro ruedas.

Pero no estamos frente a un 4×4 duro para afrontar travesías o terrenos escarpados, se trata de un crossover urbano, mas elevado que un hatchback, con tracción integral, que aporta a la seguridad en todos los caminos, sean de tierra como de asfalto. Es 8 centímetros mas alto que su primo-hermano el Clase A, y permite un uso mas amplio en términos de terrenos a transitar, pero si lo que se busca a nivel espacio es mas que un Clase A, no es este el caso.

Hay dos versiones del GLA en Argentina. Ofrecen motores y cajas de cambio de la plataforma NGCC, con el 1,6 litros de 156cv y el 2.0 litros de 211 cv, con automática de 7 marchas y doble embrague 7G-DCT y ambos con turbocompresor, siendo esta ultima la que probamos nosotros. Es un sistema de tracción de los llamados «inteligentes», que reparte electrónicamente y según el criterio de perdida de adherencia que que pueda sensar el auto, la tracción entre las 4 ruedas. La mayor parte del tiempo, funciona como un tracción delantera y puede transmitir al eje delantero del 100% al 50% de la fuerza de propulsión, y complementar al eje trasero del 0% al 50%. LO que no ofrece es reductora, ni bloqueo de diferenciales como para dejar repartido en 50/50 la tracción disponible entre ejes. Es lo que llamamos un todo terreno liviano.

El GLA es el primer SUV de Mercedes-Benz disponible como opción con la tracción integral 4MATIC de nueva generación, con distribución plenamente variable del par motor. Disponen de serie de la ayuda electrónica para descender pendientes controladamente llamado DSR (“Downhill Speed Regulation”) y de un programa de conducción especial para todo terreno. Estos dos «gadgets» se pueden activar mediante sendas teclas en la consola central, entre el equipo de audio y el climatizador.

2015-06 TEST Mercedes GLA 250 Motorweb Argentina 063 El andar del GLA 250 4matic es magnifico, así, sin medias tintas te lo decimos. Se suma a la impecable motorización y la caja DCT, los reglajes de suspensiones, las cubiertas en medida 235/50 calzadas en llantas de 18 pulgadas, que filtran a la perfección las inclemencias de nuestras calles y rutas. Pero como viene equipado con neumáticos netamente de calle, insistimos con que no es un vehículo para travesías, ni para nadar vadeando lodazales. Pero en el promedio de uso civilizado, sobre asfalto y tierra plana y seca, exigir dinámicamente al GLA 4matic es reconfortante.

La tracción integral se agarra plenamente al terreno, devolviéndole al conductor una grata sensación de control. Colabora también una dirección de tipo paramétrica, que es una servodirección inteligente, lo cual modifica la cantidad de giros de volante en relación a la velocidad del auto.

El motor es un dos litros, de inyección directa, 4 cilindros en linea con turbocompresor. Desarrolla 211cv de potencia maxima a 5.500 rpm y un torque máximo de buenos 350 Nm desde las 1.200 rpm hasta las 4.000. Todos estos datos se verifican con un comportamiento brillante y eficiente, sumado a un buen consumo. Eroga su torque de manera constante y gracias a las 7 marchas de la caja automática, la elasticidad es impecable. Pasa los cambios muy rápidamente, como todas las buenas cajas de doble embrague. El consumo es muy razonable: en ciudad, por ejemplo, nos dió un promedio de 8.5 litros cada 100 km (o 11.76 Km por litro), mientras que en ruta a 130 km/h constantes, nos dió 5.7 litros cada 100 Km ( o 17.54 Km por litro).

El habitáculo del GLA es casi calcado del Clase A. Misma plancha, mismas contrapuertas, aunque diferentes butacas delanteras. Es apenas un par de centímetros mas ancho adentro, casi imperceptible si no tenemos una cinta métrica en mano. En el caso de «nuestro» modelo de pruebas, estaba equipada las butacas delanteras con apoyacabezas separado del respaldo, regulables en altura, y muy diferentes a las vistosas butacas de los Clase A que probamos hace un tiempo (ver TEST). La posición de manejo es muy cómoda y se puede lograr gracias a múltiples regulaciones, incluyendo la de las butacas, que son ambas eléctricas y con tres memorias. Nos encantó la posición bien vertical del volante!

Todos los comandos primarios y secundarios están a la mano y como contamos en ocasiones anteriores, solo nos molesta la pantalla de 7″ de tipo flotante sobre la plancha, con una posición que si bien es muy confortable, llama bastante la atención y puede ser sujeta a intentos de robo. Incorpora entre otras funciones, navegador con GPS, Bluetooth, reproducción de variedad de medios digitales, incluyendo DVDs, y gráficos que funcionan como inclinómetros de la carrocería.

Para los mas distraídos, les llamará la atención la falta de selectora de cambios sobre la consola central, por mas que el auto sea automático. El recurso gana un montón de espacio y «aire» entre las butacas delanteras, y utiliza un pequeño brazo a la derecha del volante para hacer las veces de selectora, pudiendo elegir entre las funciones «P» (Parking o Estacionamiento), «N» (Neutral) y «D» (Drive o Directa). El resto de los programas de la caja, el modo Sport, el modo manual o el modo ECO se seleccionan desde una tecla en la consola central y los cambios se pueden hacer manualmente con las levas que tare detrás del volante multifunción.

El espacio en las plazas delanteras es suficiente, pero ya en las plazas traseras se nota una cierta limitación, tanto en el espacio para las piernas como en la altura total. En parte la altura se ve penalizada por el techo panorámico, que con sus mecanismos y cortinas de enrollar se roba unos cuantos centímetros de «cielo» para los pasajeros de atrás. Por ser un auto integral, el túnel central no se se lleva demasiado espacio en el piso, aunque dista claramente de ser plano e incomoda al pasajero central. Tres adultos en el asiento trasero viajarán comprimidos; es ideal para dos adultos y eventualmente alguien pequeño en el centro.El baúl es de 421 litros de capacidad, 80 litros mas que el Clase A. Impecablemente terminado, tiene apertura y cierre motorizado del portón trasero, pero nos queda debiendo la rueda de auxilio. Ni siquiera una temporal, nada. Así que en contradicción con el espíritu que pueda tener uno en adentrarse en terreno un poco mas rustico, fuera del asfalto, vamos al alta de una rueda extra como un potencial problema, sobretodo en un país con distancias tan largas como el nuestro. Tiene neumáticos Run Flat, pero sabemos que son solo un paliativo y no se conllevan con nuestras grandes distancias donde ademas conseguir un neumatico de este tamaño atípico no es tarea sencilla.

El nivel de equipamiento de esta única versión disponible en Argentina del GLA250 4matic es muy completo, con casi todo lo que le podríamos pedir a un Mercedes. Solo faltaría, a nuestro entender, una cámara de visión trasera para complementar los sensores de estacionamiento acústicos. Por mas que tenga unas tiras de leds de colores que aportan visualmente al sensor de obstáculos delanteros y traseros, una cámara es siempre útil en maniobras de retroceso, especialmente en vehiculos de cola alta.

Duramente impactado por la segunda escala del llamado «Impuesto al Lujo», el precio del Mercedes-Benz GLA250 se ve disparado hasta los 126.900 Dolares, cifra cercana a todos sus competidores de franja, como pueden ser el Audi AQ3, el BMW X1 o el Range Rover Evoque. Independientemente del precio, para quien es este modelo? Claramente para quienes busquen mas diseño y tecnología que un vehículo todo terreno. Se trata de una propuesta urbana, que puede llegar a manejar algún terreno mas resbaladizo, pero que se encuentra cómodo mas que nada sobre el asfalto. Un pequeño y maravilloso aparato que termina siendo, por practicidad, tenida y confort de marcha, hasta mas interesante que un Clase A. Su garantía, uno de los puntos que también debemos criticar, es de solo dos años, aunque sin limite de kilometraje.