Lanzado en 1963 en el Salón del Automóvil de Turín, el Fiat Abarth 595 está celebrando 60 años de historia. Desde el principio, cautivó tanto al público como a la prensa y se convirtió en un ícono italiano. Originalmente, se presentó en dos modelos distintos en Europa, el Abarth 595 y el Abarth 695.
En ese entonces, Carlo Abarth dio a conocer el 595 al mundo. Basado en el Fiat 500 D, experimentó mejoras sustanciales en su desplazamiento y motorización, logrando un significativo aumento de potencia y rendimiento.
El Fiat Abarth 595 se destacó visualmente con su parrilla delantera perforada y elementos distintivos, lo que lo transformaba en un look más deportivo. Este modelo, cargado de agresividad, ofrecía un 30% más de potencia que su versión original. Por eso, marcó una época.
Fiat Abarth 595: presente y futuro
Es que Abarth tomó un auto urbano exitoso, el Fiat 500D, y lo transformó en un vehículo de alto rendimiento.
Se diferenciaba con su llamativa parrilla delantera perforada del tipo 850TC, el brillante grabado en metal de “Fiat Abarth 595” en la parte trasera y el capó. Y la orgullosa inscripción de “Campeón del Mundo” en el lado derecho, el cual hace referencia a muchos de los récords logrados por las creaciones de las Officine di Corso Marche. Esta misma filosofía se mantuvo, evolucionando hasta el reciente Abarth 500e, nacido del Fiat New 500 eléctrico, el más vendido en Europa.
El legado del 595 se consolidó con la presentación del Fiat Abarth 695 en 1964. Este modelo marcó el inicio de una tradición de mejoras técnicas y estéticas, estableciendo los cimientos de la marca Abarth y su enfoque orientado al rendimiento. Aquí llego recién en 2013 (ver nuestra prueba).
Hoy, los valores de rendimiento y estilo promovidos por estos predecesores son la base de la gama Abarth. Con modelos como el de 165 CV y el poderoso Abarth 695 de 180 CV, sigue enriqueciendo su legado con vehículos emocionantes y llenos de carácter.
