Originalmente presentado en Europa en 1983, el Fiat Uno fue un verdadero suceso en ventas, pero además marcó una verdadera revolución dentro del segmento de autos chicos. Hasta entonces los autos de dicho segmento eran, tal como su posicionamiento lo indica, pequeños, rudimentarios y hasta incómodos, pero el Uno cambió eso para siempre.

Tras cuatro años de desarrollo se presentó en 1983, para ser elegido como Auto del Año en el viejo continente un año más tarde. Le ganó a uno de sus principales rivales, el Peugeot 205. Sin embargo el modelo de Fiat era bastante superior: contaba con múltiples detalles que lo diferenciaban del producto del león, como mayor amplitud y comodidad, tenía un sistema de suspensión algo más elaborado, mayor calidad de construcción y un diseño que no pasaba desapercibido.

Diseñado por el estudio Giugiario-Italdesign el propósito fue el de reemplazar a los viejos Fiat 127, conocido en Argentina como 147. Su presentación se llevó a cabo el 19 de enero de 1983 en Cabo Cañaberal, en los Estados Unidos, país en el que el Uno nunca estuvo a la venta. Sin embargo su develación se realizó en ese lugar debido al marketing: lanzar un auto tan rupturista, debería estar ligado a otro planeta, justo en una de las plataformas más importantes en el mundo aeroespacial.

40 años del Fiat Uno

Inicialmente su producción marcó el uso extensivo de robots, con una nueva y fructífera relación entre el centro de diseño y el de ingeniería. Eso estableció lo que en la actualidad se denomina como «Diseño Funcional», y estableciendo un notable salto de calidad gracias, en parte, a la importante inversión económica realizada. De hecho, con cuatro años de investigación y diseño, el presupuesto de alrededor de un billón de liras fue la inversión más importante que Fiat había hecho en un vehículo hasta ese momento.

Eso conllevó a un tipo de fabricación mucho más automatizada, que con diferencias. es la que manejan muchas de las fábricas en la actualidad. Inicialmente el Uno estuvo disponible en Europa con motorizaciones económicas, conforme a las necesidades de aquellos mercados. Pero también tuvo variantes potenciadas, como aquellas Turbo.

El Uno en Sudamérica

En 1984 Fiat inició la fabricación del Uno en Brasil, poco tiempo después de su develación mundial. Algunas cambios en la estructura le significaron a su vez contar con diferencias estéticas, la más notoria el capot, que en la variante fabricada en Brasil envolvía parte de los guardabarros, algo que no sucedía en el modelo europeo.

En 1989 fue remodelado en Europa con un rediseño, y precisamente durante ese mismo año comenzó la producción en Argentina. Inicialmente se presentó en configuración tres puertas, con la versión SCV con motor 1500 como máximo exponente. Se trató del primer auto chico en contar con múltiples equipamientos que hasta entonces era propios de modelos de otros segmentos, entre ellos aire acondicionado, o levantacristales eléctricos.

En 1993 las versiones locales fueron rediseñadas, con un frontal que se emparentaba al del rediseño de 1989 conocido en Europa, aunque menos profundo. Esos cambios, sumado a un reposicionamiento y a la aparición de la carrocería de cinco puertas, hicieron que en Argentina se convierta en uno de los autos más deseados a inicios de los noventa.

Su éxito arrollador obligó a Sevel a tener lista de espera de hasta 6 meses o más por un Uno por no poder satisfacer la demanda,. La aparición del Palio en 1997 hizo que el Uno se vea reemplazado, por lo que sus ventas y gama se acotaron considerablemente.

Para el año 2000 parecía que su final estaba escrito, e incluso ya se había abandonado la producción en Argentina, siendo únicamente importado desde Brasil. Sin embargo las ventas en el país vecino hicieron que el modelo se mantenga en producción, e incluso que en 2004 sufra el mayor rediseño de su vida comercial.

Reservado como el auto más económico del mercado, se comercializó hasta fines del año 2013, cuando la obligatoriedad de incorporar frenos con ABS y doble airbag frontal obligó a Fiat a discontinuarlo. De aquella primera generación se produjeron 6 millones de unidades en Europa, junto a otras 3 millones en Brasil. En Argentina la cifra fue muy inferior, rozando las 200.000 unidades.

Por René Villegas

Periodista y fanático de los autos y el automovilismo desde que tengo uso de razón. Colaboré en las revistas Auto Plus y Parabrisas, y desde 2019 edito Motorweb Argentina.

Deja una respuesta