Ford convocó a propietarios de S-Max y Raptor por problemas en la suspensión trasera y en la transmisión, respectivamente. Se trata de unidades producidas en España en 2017 y 2018 (para el primer caso) y de Tailandia del año 2020 (para la Pick-up).
Con respecto a la S-Max, existe la posibilidad de que los tornillos que vinculan las bieletas de ajuste de paralelismo de la suspensión trasera con los porta-mazas se deterioren con el tiempo. “Se debe a un defecto de su protección anticorrosiva. Si ello ocurriere, el tornillo y la bieleta podría romperse reduciendo la capacidad de controlar la dirección de vehículo. E incrementando el riesgo de accidentes con posibles daños físicos a los ocupantes del vehículo y terceros”, advirtió.
Raptor, el problema
Además, sobre la Raptor, informó que podría presentarse una falla en la bomba de fluido de transmisión que provoque la disminución de la presión hidráulica en la transmisión automática. “Podría resultar en la pérdida de tracción del vehículo, incluso durante la conducción. Esto podría generar riesgo de accidentes con posibles daños físicos a los ocupantes de vehículo”, detalló.
Así, la automotriz añade que procederá a la actualización del software del módulo de control de la transmisión y del módulo de control de motor. “El nuevo software modifica la condición de operación de la bomba de fluido de la transmisión para evitar la ocurrencia de la condición” detectada, precisó.
Ford aclaró que no se han registrado incidentes de este tipo en el mercado local para la S-Max y Raptor. En ambos modelos, los trabajo se realizarán de manera gratuita en un Concesionario oficial.
Para coordinar un turno o para realizar alguna consulta sobre esta campaña preventiva de seguridad, el cliente se debe comunicar a Centro de Atención al Cliente de Ford al 0800-888-3673, de lunes a viernes de 9 a 21.