Próximos al lanzamiento en Argentina del nuevo Ford Mustang, nos pareció apropiado deleitarnos junto a nuestros amigos de Targa Florio y de DetailMania Studio, con un modelo Convertible de la primera generación, del año 1965. Con galería de fotos exclusivas por Martín Lübel.
El Ford Mustang fue un auto revolucionario. Cuando apareció por primera vez en Estados Unidos en 1964, irrumpió en un mundillo de autos grandes, voluptuosos y pesados, rompiendo el paradigma de lo que se entendía por entonces en Norteamérica por “sport-car”.
Gracias a todo un equipo de ejecutivos nuevos en los cuarteles generales de Ford en Detroit, al visionario de Lee Iacocca, al entusiasmo emprendedor de Henry Ford II, Donald Frey como jefe de ingenieros, y el lápiz hábil de John Najjar como líder de los diseñadores, el compacto “Ponycar” de Ford provocó un verdadero furor a su lanzamiento.
Cuando nuestros amigos de Detailmania Studio nos comentaron que tendrían en su estudio de Detailing automotor una unidad descapotable completamente original de la primera serie, no dudamos en ponerla delante de las lentes de Lübel. La apuesta se redobló cuando llegamos al flamante taller de cosmética automotriz y nos encontramos con un segundo Mustang, de la quinta generación.
El Ford Mustang va por su sexta generación actualmente. La sexta es la primera generacion verdaderamente global y pensada desde el vamos para ser vendida en todos los mercados del mundo. Con esta decisión, su trepada en calidad general, ajuste y prestaciones, colocaron al desarrollo del nuevo Mustang al tope de las exigencias. Se comenzará a vender en nuestro país en muy breve. Será la primera generación que, entre muchos otros detalles, podrá ofrecerse de serie con volante a la derecha para los mercados que lo requieran, como Reino Unido, Japón, Australia o Sudáfrica, solo para nombra a algunos. Pero volvamos al primero de todos los Mustangs.
Cómo surgió la idea de hacer un auto como éste, en un país como Estados Unidos hace mas de 50 años? Ford necesitaba un modelo atractivo. Algo diferente. Pocos años antes, había puesto todo su esfuerzo en la creación del Edsel, un modelo con mucha tecnología para la época, pero no había «escuchado» al mercado, convirtiéndose en un rotundo fracaso comercial. Los «Baby Boomers» -aquella generación de norteamericanos nacida luego de la segunda guerra mundial- miraba con cada vez mas interés los nuevos modelos que llegaban importados desde Europa. Eran más pequeños, más livianos, parecían más deportivos y tenían precios atractivos. Chevrolet ofrecía el Corvette en repuesta a esto, pero era bastante mas caro para los mas jóvenes. Y allí es donde Ford puso el eje del desarrollo de su nuevo best-seller.
Un nuevo equipo de ejecutivos en distintas áreas de Ford eran Baby-Boomers ellos mismos, con lo cual no les fue difícil creer y empujar un proyecto como el del Mustang. Para mediados de 1964, el nuevo Ford Mustang salía al mercado con carrocería coupé y proporciones muy modernas para ese momento. Con su cola lanzada, recordaba a otros modelos deportivos europeos y se despegaba del legado estético del típico auto norteamericano. Pero el truco mayor, no solo residía en su aspecto y tamaño, si no en que estaba basado en recursos existentes de Ford, como los modelos Falcon y Fairlane. El Ford Falcon era el auto mas barato de Ford a inicios de los ’60s y su plataforma y componentes sirvieron en gran parte al desarrollo del primer Mustang, volviéndolo un proyecto muy atractivo comercialmente y extremadamente rentable. Incluso fue innovador en sus formas de venta en cuotas.
En septiembre de 1964, en el film de James Bond «Goldfinger», una de las chicas Bond maneja un Ford Mustang en versión descapotable, convirtiendo a la escena en uno de los primeros «product placement» intencional de autos en el cine. Según el registro de un fanático del modelo, el Ford Mustang tiene mas de 3.300 apariciones en la Gran Pantalla a lo largo de mas de cinco décadas de vida. Era la nueva silueta descapotable, que era exactamente como el auto de las fotos de esta nota, el primer Mustang convertible. De formato compacto, 4 lugares, butacas delanteras individuales (todo una declaración de deportividad en la Norteamérica de los 60’s), capota de accionamiento eléctrico y un poderoso motor V8 de 200 caballos de fuerza, le imprimían al nuevo Ford toda la deseabilidad que podía tener un cliente en aquellos años.
Para remarcar lo deportivo del modelo, debía mostrarse solido en pista. Para esto, fue fundamental la figura de Carroll Shelby, que supo dotar a los Mustang de versiones muy picantes que supieron demostrar su dotes en circuitos, no solo de Estados Unidos, si no tambien de Europa. En el caso de la unidad de las fotos, monta un motor V8 de 200 caballos (@4.400 rpm) que iban combinados con una caja automática. Es el motor de 289 pulgadas cubicas, algo así como 4.7 litros de cilindrada. Este motor de la serie «Windsor» desarrollaba un torque máximo de 382Nm a las 2.400 rpm. Una nada despreciable cifra, que aun hoy sorprende.
Ford planeaba vender unos 100.000 Mustangs el primer año de producción. Sin embargo, tal fue el furor por el nuevo modelo, que terminaron fabricando unas 400.000 unidades. Es uno de los debuts mas contundentes de un modelo de producción aun hoy en la industria norteamericana. Y luego de 24 meses de fabricación, ya habían llegado a la marca de un millón de Mustang fabricados. Otro dato curioso es que el primer Mustang vendido a un cliente, fue para una maestra de Chicago, en Abril de 1964. Increíblemente, esa señora aun conserva su Mustang.
