Hace unos meses habíamos probado la versión naftera del Q3, y ahora le llega el turno a la variante turbodiesel, que sorprende por la eficiencia, rapidez y bajo consumo de su motor TDi. Todos los factores a favor y en contra de este compacto Sport Utility alemán, fabricado en España. Fotos por Martín Lübel.
Hay vehículos que nos cuesta devolver a la hora de terminar un test. Por diferentes motivos, y luego de años de probar y probar los mas variados autos, ciertos modelos hacen mella en nosotros y sentimos que son especiales, que dan en el clavo en un montón de aspectos. Es el caso de este Audi Q3 2.0 TDi, con 177cv de potencia y caja secuencial S-tronic, combinado con la tracción integral Quattro. No nos vamos a extender sobre conceptos generales del diseño y la génesis del Q3, que ya fue analizado en nuestra web hace un año exactamente cuando probamos la versión naftera con el motor 2.0 TFSi de 211cv (podés leer el test AQUÍ). Si nos focalizaremos en su planta motriz y su rendimeinto, que es la novedad de esta versión.
El Audi Q3 es un SUV compacto, con apenas 4.38 metros de largo, que son solo 7 centímetros mas que un A3 Sportback. Su tamaño comprimido, con cortos voladizos delanteros y traseros, se combinan a la perfección con su tracción integral Quattro para lograr un excelente desempeño dinámico, mas cercano al de un deportivo que al de una 4×4. Pesa poco para lo que representa -solo 1585 Kilos- en parte por el uso extenso de material liviano, una técnica que la marca Audi viene dominando desde hace décadas. Abunda el aluminio, del cual están hechos el capot, el portón trasero, las parrillas de suspensión delanteras, las almas de los paragolpes delanteros y traseros, entre otros detalles. Y gracias a su motor, empuja con alegría en todos los regímenes de vueltas.
Bajo el capot encontramos un 4 cilindros de 1968 centímetros cúbicos con tecnología TDI. Logra unos 177cv de potencia a las 4.200 rpm y sorprende con un alto torque máximo de 380 Nm, disponible ya desde las 1.750 rpm, y manteniéndolo hasta las 2.500 vueltas. Para lograr estas cifras, el motor 2 litros tiene un turbo de geometría variable, inyección Common-Rail, cuatro válvulas por cilindro, con intercooler frontal e inyectores piezo-eléctricos. Toda una perlita en el mundo de los motores gasoleros que podemos comprar hoy día en nuestro país.
Para terminar de completar el combo mecánico de este Audi Q3, tenemos, por un lado la tracción integral Quattro, que es permanente. La mayoría del tiempo, la tracción se reparte mayoritariamente al tren delantero, pero si las condiciones de tracción se complican, el embrague multidisco hidráulico que se comanda electrónicamente de modo automático, reparte la tracción entre las 4 ruedas según sea necesario. Por otro lado, tenemos la caja de velocidades, que es otra joyita tecnológica. Se trata de una S-tronic de 7 velocidades muy bien relacionadas, automática con doble embrague, que pasa los cambios con una velocidad sorprendente. Tiene modo completamente automático, modo manual y modo Sport, que puede ser manipulado tanto desde la selectora, como desde las levas detrás del volante. Todo lo mecánico enumerado hasta ahora se combina en un mix impecable, que se complementa además con un muy bajo consumo.
La sonoridad del motor TDi es bien baja, correctamente aislada del habitáculo. Sus reacciones, ya desde bajos regímenes, son alucinantes, y le permiten a este SUV acelerar de 0 a 100 en tan solo 8.1 segundos! es una cifra que hasta hace dos décadas atrás conseguía un muy buen deportivo naftero, y hoy lo podemos lograr con absoluta seguridad en una «camionetita familiar» y encima, gasolera. El consumo, a pesar de la agilidad y rapidez de este Q3, es muy contenido. A lo largo de unos 1.200 kilómetros de pruebas, con ruta, caminos de campo y transito urbano, obtuvimos una media total de 6.5 litros cada 100 kilómetros recorridos. En ciudad, se conforma con solo 8.5 litros cada cien, mientras que a velocidad constante de 130 km/h, con el motor girando a solas 2.200 rpm, consume solo 5.6 litros/100 Km.
«Nuestra» unidad estaba ademas equipada con un opcional muy interesante, el DRIVE SELECT. Se trata de un sistema electrónico para seleccionar diferentes modos de conducción, y que actúa directamente sobre la respuesta del acelerador, la velocidad del pasaje de marchas, la rapidez de la dirección(eléctrica) y su grado de asistencia. Permite cambiar entre modos «Dynamic», «Comfort» o «Auto» para ir variando las respuestas de todo el conjunto mecánico según las intenciones de conducción y las condiciones del camino.
El habitáculo de esta unidad estaba tapizado en cuero «Milano» en tono muy claro de gris. Contrariamente a la versión que testeamos hace un años tras con motor 2.0 TFSi que tenia tapicería en cuero y alcántara negros, este interior, muchísimo mas luminoso y alegre, aunque sumamente sensible al roce, daba una sensación de mayor amplitud al habitáculo, sumado al efecto lumínico del amplio techo panorámico acristalado. El habitáculo es compacto y de tamaño justo para cuatro adultos en viajes largos, o cinco personas, pero en trayectos mas cortos.
Como habíamos notado cuanto probamos el anterior Q3, su baúl es pequeño y con solo 460 litros de capacidad de carga (pueden ser ampliados a 1365 si rebatimos el respaldo trasero totalmente), sumado a la abrupta pendiente de la caída de la cola, el espacio es apenas justo. Debajo el solido piso del baúl, está la rueda de auxilio, de tipo temporal, una solución muy moderna en Europa, pero poco practica en Argentina, donde las extensiones de territorio son muy vastas y podemos complicar un viaje largo al no poseer un auxilio homogéneo con las demás ruedas del auto.
Mala nota para Audi y su política de opcionales, que dejan afuera del equipamiento de serie items como los asientos delanteros calefaccionados, los sensores de estacionamiento, la cámara de marcha atrás, el navegador con GPS, o los faros delanteros en Xenón. Son todos opcionales que se pagan aparte a precio elevado y que hoy en día ya los encontramos como «comunes» en autos medianos de producción regional. Por supuesto que entre los ítems no negociables como equipamiento de serie hay una abultada lista de elementos de seguridad activos y pasivos que colocan a este pequeño SUV entre las opciones mas seguras de su franja de mercado.
La calidad de construcción, la insonorización magistral y el andar aplomado forman parte de la dotación standard de este modelo, pero aun así, y teniendo en cuenta el grave impacto del distorsivo impuesto que aplicó el Gobierno a inicios de este año, para configurarlo bien, harán falta varios miles de Dolares mas. Tal vez, con este «impuestazo» de por medio, sea el momento de revisar la política de opcionales e incluir algunos en el precio final, de modo de balancear un poco mas la ecuación final.
El precio de esta motorización TDI de 177cv del Audi Q3 aumentó con el citado impuesto desde los 66.500 USD que valía el año pasado la versión Serie, a unos 116.150 USD al momento de publicar esta nota. Para sumarle los opcionales que tenía la unidad de pruebas, el año pasado totalizaban unos 13.000 USD extra. Como siempre en la marca Audi, la garantía es de 3 años o 90.000 kilómetros, lo que suceda primero.
Entonces, para quienes es esta versión del Q3 TDI S-tronic? sin dudas para quien le guste la eficiencia mecánica y tecnológica, para quien ame viajar mucho y sentir la satisfacción de un conjunto mecánico impecable, con gran comportamiento dinámico, bajo consumo, pero sin voluntades de hacer grandes travesías off-road, si no mas bien algunos caminos de campo tranquilos y algunas entradas a la playa. Sin dudas un producto muy interesante que dará muchas satisfacciones a quienes les guste disfrutar de la conducción.
Que nos encantó del Audi Q3 2.0 TDI Quattro:
- superioridad mecánica
- caja de velocidades
- bajo consumo
- altas prestaciones para un SUV Diesel
- calidad general
Que no le perdonamos al Audi Q3 2.0 TDI Quattro:
- precio muy elevado
- política de opcionales
- rueda de auxilio temporal
- baúl pequeño
- despeje limitado
