Contacto: Citroën C4 Lounge 1.6 HDi Exclusive

El lanzamiento de un auto fabricado en Argentina siempre es buena noticia. Pero más aun cuando se trata de un modelo del segmento mediano, que implica una tecnología y una calidad superior para su fabricación. El nuevo C4 Lounge, un sedan tricuerpo de 4,62 metros de longitud, fue mostrado por primera vez en  el Salón de Buenos Aires en Junio pasado. En esos días, fue presentado formalmente, con pruebas dinámicas incluidas, a más de 500 invitados que se trasladaron a la capital mendocina para hacer base allí y salir a probar esta nueva gama de modelos de la marca francesa.

Periodistas, concesionarios e importadores de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela transcurrimos tres intensas jornadas para conocer mejor al C4 Lounge, un modelo, que como adelantamos en su evento de presentación, pretende imponerse como el referente en confort y calidad del segmento denominado M1, que se lleva casi el 20% de las ventas totales de autos de Argentina. Se trata de un sedan derivado de la «Plataforma 2» de PSA, actualizada, y que es una declinación de la segunda generación del Citroen C4 europeo. Pensado inicialmente para mercados emergentes con China a la cabeza, el C4 Lounge llega a toda Latinoamérica desde la planta bonaerense de El Palomar. El auto posee una tasa de integración de componentes regionales del 62% y en líneas generales podemos asegurar que la primera impresión es muy positiva.

Se presenta como un sedan robusto, con líneas de carrocería bien marcadas, y lo que normalmente solemos calificar de “musculo”. Su silueta se expresa como un auto bien plantado, con llantas de 17 pulgadas en el 90% de los modelos (solo la versión Origine 2.0 viene con llantas de 16 pulgadas) aunque con  un excesivo despeje del piso para nuestro gusto. Pero esta elección, sin dudas, redunda en un buen confort de marcha y permite que el auto difícilmente toque en sus partes bajas en lomadas, cunetas y rampas muy empinadas. Hay una gran distancia conceptual a nivel diseño respecto al anterior generación del C4 tricuerpo y el resultado se ve a las claras : es un auto actual, deseable, bien proporcionado. Mix justo entre elegante y deportivo. Esto es también porque diseño de este C4 Lounge Mercosur es diferente a otros C4 Lounge que se comercializan en China o Rusia. Posee menos ornamentos cromados, mejores terminaciones interiores, algunos equipamientos exclusivos como la cámara de marcha atrás o las luces de leds diurnos en forma de L, y el paragolpes trasero, con un falso difusor central en negro y doble salida de escape con punteras cromadas lo vuelve mas sport a la vista (en las versiones nafteras).

Mientras en el anterior C4 el tercer volumen fue integrado al sedán de un modo «peculiar», en esta generación, el trabajo de los diseñadores ha arrojado un resultado donde tranquilamente podríamos no adivinar que es un derivado de un hatchback francés de 5 puertas. Su diseño es homogéneo y coherente desde todos los ángulos. Con una trompa bien afilada, alta y elegante sin perder su nota de agresividad, el C4 Lounge ofrece rasgos de diseño distintivos que se rehacen a la tradición de la marca en modelos muy importantes en su propia historia. La luneta trasera, cóncava, se remite estilísticamente a las lunetas posteriores primeros del Citroën CX, el alta gama francés que supimos ver como importado en Argentina a final de los años 70’s e inicio de los 80’s. Luego retomado también por el gran Citroën C6 en esta parte del siglo, el cristal trasero curvado, ya es una “firma” de diseño para la marca francesa.  En el lateral del C4 Lounge, el borde inferior de la ventanilla trasera se rehace al mismo detalle que encontramos en la magnífica Coupé SM, el Citroën de dos puertas desarrollado (y motorizado) en conjunto con Maserati a inicios de los 70’s en Europa.

Nos subimos al C4 Lounge y nos encontramos con la grata sorpresa que se respira un aire a renovada calidad. La famosa “calidad percibida”, esa positiva sensación que el consumidor tiene, por tacto, visuales y demás sentidos, acerca de que lo que tiene en frente está bien construido, es uno de los grandes atributos de este nuevo modelo nacional. La plancha de abordo, inyectado en un material blando y bien opaco, es la misma pieza que podemos encontrar en autos importados de mayor valor, como el DS4 francés. El mismo material lo podemos encontrar también en la parte alta de las contrapuertas. Las butacas, en cuero en la versión Exclusive que probamos, están bien perfilados y tienen formas, parches centrales y costuras que demuestran un esmero mayor en el diseño de cada asiento, favoreciendo el ambiente a bordo. No es casual entonces que Citroën haya elegido el término LOUNGE para acompañar al modelo, ya que ese es el atributo que se quiere destacar del modelo: comodidad y calidad de vida a bordo en un ambiente muy agradable.

Las plazas traseras también tienen una muy buena concepción y el respaldo trasero se ha inclinado un poco mas que el promedio, a 29°, lo que ofrece una posición muy confortable. Solo la plaza central trasera es un tanto incomoda para quien viaje allí, por la forma del apoyabrazos central rebatible y el cojín del asiento sobreelevado. Burletes dobles en las puertas y el parabrisas del tipo acústico contribuyen también a que el ruido en el habitáculo en vea reducido y así aumente la sensación de confort a bordo. Incluso en esta versión turbodiesel HDi,  que siempre son más rumorosos que los nafteros,  el confort acústico está bien logrado. Salvo que vayamos con las ventanillas abiertas, quienes viajen como pasajeros no lograrán identificar el ruido del motor.

La posición de manejo es  cómoda y fácilmente se  puede encontrar la ideal gracias a las múltiples regulaciones de columna de dirección y la butaca.  El volante, perdió su  centro fijo y volvió a ser convencional. El centro del mismo es  de  generoso tamaño y además del airbag, aloja a ambos lados teclas para manejar funciones de  audio,  control de velocidad crucero y el limitador de velocidad. Particularmente prefiero los volantes de un diámetro un poco menor a los del C4 Lounge, pero igual es cómodo y de buen grip, forrado en cuero y con insertos aluminizados que realzan su aspecto. La presentación general del interior es muy buena, aunque el C4 Lounge carece de ciertos elementos que no deberían no estar presentes: por ejemplo no tiene indicador con escala de la temperatura del motor, ni con aguja, ni digital. Esto quiere decir que el estado del motor pasaría del habitual «sin novedades» a «se recalentó» mediante el encendido de un testigo luminoso: y eso, sabemos, ya es demasiado tarde. Hoy día, cuando los autos son todos nuevos, no es un inconveniente este faltante, pero en unos años y con muchos kilómetros a cuesta sería importante poder contar con este instrumento de medición y monitoreo.

Mas allá de esto, el equipamiento de este C4 en versión Exclusive con el «Pack Select» que agrega faros de bixenón con lavafaros  y techo eléctrico, es muy generoso y trae de todo. Desde el arranque sin llave mediante un botón, bloqueo y desbloqueo de las puertas por proximidad, climatizador digital bizona, la mencionada pantalla MyWay de 7″ a color, que oficia de centro de entretenimiento, comunicaciones, GPS y visión trasera, luces traseras con leds, luces de marcha diurna delanteras con tiras de leds, rueda de auxilio homogénea en tamaño con las demás, encendido automático de luces y limpia-parabrisas, sensores de estacionamiento delanteros y traseros, iluminación del tablero personalizable en la combinación de sus colores de iluminación, y muchos etcéteras. Me pareció que el sonido del equipo de Audio, firmado ARKAMYS, podría tener un mejor sonido. También sostengo que un auto de esta gama debe tener un botón de apertura externa de la tapa de baúl, es imperdonable tener que abrirlo si o si con la llave en al mano, o internamente desde el botón a la izquierda del tablero, debajo del botón para encender el motor.

A nivel seguridad ofrece lo que ya es (afortunadamente), la media del segmento: hasta seis airbags, frenos con cuatro discos, ABS con EBD, Control de tracción y estabilidad ESP, cinco cinturones inerciales de 3 puntos con sendos apoyacabezas regulables, ganchos ISOfix para sillas infantiles, faros antinieblas delanteros y traseros. Suma como diferencial, los proyectores al bixenon con lavafaros en las versiones mas caras, un ítem que no todos sus competidores pueden ofrecer. Los faros al xenón no pueden agregarse posteriormente y el poder elegirlos a la hora de la compra del modelo siempre es un plus. (recuerden, el verdadero xenón lleva aditamentos especiales complejos y nada tiene que ver con los kits «truchos» que ofrecen algunos concesionarios inescrupulosos como «opcional» aftermarket). También el C4 ofrece, como novedad, el sensor de angulo muerto en los espejos retrovisores, que hacen titilar un led cuando otro vehículo nos sobrepasa justo a esa altura en la cual desaparece de nuestro retrovisor, pero aun no lo notamos con el rabillo del ojo.

Los frenos del C4 Lounge se comportaron de modo mas que aceptable y no mostró demasiada fatiga ante el abuso reiterado en algunas frenadas de prueba. Como decíamos el andar es confortable, pero sin dejar de transmitir cierto aplomo reconfortante. Hasta los 120-130 km/h el andar es sereno, aunque si el camino se pone irregular u ondulante, la carrocería se inclina levemente. Es un sedán de corte familiar y las suspensiones están calibradas para ese destino, aunque transmiten mas seguridad que las suspensiones de la generación anterior que ya era demasiado flotadora a velocidad elevada.

Cargado con 4 personas, aunque sin equipaje, los 115cv del HDi se mostraron solventes a la hora de rutear, y sin problemas al momento de algún sobrepaso, aunque requiere de un rebaje de 5ta  a 4ta marcha para poder afrontarlo con la suficiente soltura. En ciudad es ágil y elástico y el pequeño motor 1.6 HDI de 115cv eroga, en torque, los mismos 240 Nm de par que logra el motor 1.6 THP naftero de 163cv, lo que demuestra el buen rendimiento de este propulsor. No es el Diésel mas potente ni rápido de su segmento, pero puede dar buenos resultados para quien guste de viajar con mínimo consumo y a velocidades contenidas. Citroën insiste en que el 1.6 HDi se lleva perfecto con la caja de 5 marchas, pero nosotros estamos convencidos que con una sexta marcha iría mucho mejor.

El precio del Citroen C4 Lounge1.6 HDi Exclusive, al momento del lanzamiento, es de 181.500 Pesos. Si se le suma el Pack Select, trepa hasta los 188.500 Pesos, un valor extra que creemos que vale la pena pagar por el equipamiento agregado en el paquete. La garantía es de 3 años o 100.000 kilómetros y hay 7 colores de carrocería para elegir. Las primeras entregas comenzarán a finales del mes de Septiembre.