El vehículo líder en ventas de Argentina es una pick-up de tamaño medio. En un país en crisis, su precio llega a cuadruplicar el valor de un auto accesible. ¿Cómo hizo Toyota para lograr obtener semejante rendimiento de ventas con la Hilux? La prueba está en cada uno de los clientes que depositan la confianza en una marca que les garantiza seguridad. Pero, además, con constantes mejoras que la dejan siempre competitiva. Ahora la línea 2021 incorporó potencia, seguridad y confort. ¿Suficiente?

La nueva Hilux se ofrece en Argentina desde finales del 2020, momento en el que se presentó al mercado con un leve rediseño exterior. Principalmente los cambios se hacen notar en el frontal, en el que los cromados la hacen más imponente. Lo más curioso es que las versiones de inicio de gama no contemplan cambio estético alguno. Sí lo hacen las más completas.

Desde los niveles SR en adelante la Hilux sí agrega el nuevo frontal. La SRX de la nota, la más completa, monta nuevas ópticas que si bien mantienen la tecnología LED para las luces principales, incorporan una nueva identidad visual para la función diurna, un tanto más delicada y personal. 

También en esta versión full, detrás del logo de Toyota aparece escondida una de las novedades de la renovada chata. Se trata del radar, encargado de sensar si existe algún obstáculo por delante, para así poder hacer funcionar el control de velocidad crucero adaptativo. Esta incorporación se asocia también al alerta de colisión frontal con frenado autónomo de emergencia y al sistema de alerta de cambio de carril involuntario.  

Entre otras mejoras, la Hilux SRX cuenta además con sensores de estacionamiento delanteros y traseros, luces rompenieblas delanteras con tecnología LED, nuevos faros traseros también con LED, y nuevas llantas de aleación de 18 pulgadas, para culminar en un combo vistoso y renovado, a pesar que los cambios en general terminan siendo leves. 

En líneas generales, la nueva Hilux luce más futurista debido a todas estas renovaciones pero, de todas formas, mantiene la base estructural que estrenó a inicios de 2016. Luce actual, y eso hace que no haya necesitado presentar variaciones en las partes duras. 

Por dentro

Si los cambios vistos en la Hilux 2021 son relativamente poco considerables desde el punto de vista exterior, en el habitáculo son aún menos perceptibles. El tablero de instrumentos presenta nuevo estilo, mientras que una de las más importantes mejoras aparece en el sistema multimedia, que por suerte ganó en rapidez y usabilidad.

El mismo ofrece además conexiones como Android Auto y Apple Carplay, con una pantalla táctil de 8”, que mantiene las funciones de GPS y TV Digital. Además, de manera exclusiva en la SRX aparece el sistema de sonido de alta fidelidad JBL, visible por dos twitters sobre la parte interna de los espejos, junto a dos altavoces por sobre la zona alta de la plancha de a bordo, que realmente no quedan muy prolijos. 

La calidad general, si bien es acorde para un vehículo de este segmento, tiene detalles que no se pueden pasar por alto. Entre ellos, los parasoles, de un material plástico con incipiente rebarbas. Además el del conductor no presenta ni siquiera un espejo de cortesía, menos aún iluminación. 

Frente al volante se destaca una postura muy lograda gracias a las completas regulaciones, mientras que los asientos delanteros sumaron la función de ventilación, aunque no son calefaccionados. El diseño en general se mantiene fiel a la tendencia Toyota, con líneas jugadas pero detalles algo anticuados, entre ellos el reloj digital, o mismo el veterano comando del control de velocidad crucero por detrás del volante. 

Mecánica repasada

El motor 1GD de 2.8 litros que monta la Toyota Hilux desde que estrenó la octava generación sufrió un incremento de potencia importante por primera vez. Pasó de ofrecer 177 a 204 caballos de fuerza con 500 Nm de torque entre las 1.600 y 2.800 rpm, superando por escaso margen (y donde el marketing juega mucho) a varias rivales, entre ellas a la Chevrolet S-10 (200 CV), Ford Ranger (200 CV), Nissan Frontier y Renault Alaskan (190 CV) y Volkswagen Amarok 2.0 (180 CV). Sólo queda por debajo de la Ranger Raptor (213 CV) y de la VW Amarok V6 (258 CV).

Pero el incremento en la potencia no es solo un tema de marketing. La mejora se siente en el día a día, donde se muestra más contundente, y también en las prestaciones. Ahora obtiene el cero a cien km/h en pocos 10,5 segundos, con una velocidad máxima real de 185 km/. Eso sí, en el tablero acaricia los 200 kilómetros horarios.

Además mejoró en elasticidad, debido también a un mejor rendimiento de la transmisión automática de seis velocidades, que se siente más a gusto y eficiente con el mayor torque del motor. Los consumos son coherentes, con unos 9,5 litros a 120 kilómetros por hora cada 100 kilómetros. En ciudad gasta unos 11,5 litros cada cien.  

Si bien Toyota declaró que realizó mejoras en la suspensión, la verdad es que la Hilux continúa siendo la menos eficiente en términos de confort de marcha. Su andar es firme y saltarín, principalmente por el eje trasero. Incluso cuando realizamos nuestros primeros kilómetros medimos la presión de los neumáticos creyendo que tenían mucho aire, pero sorpresivamente solo contaban con 25 libras. Le agregamos 10 más, y tampoco cambió tanto: llegamos a percibir menor rumorosidad en el interior. 

En ruta tampoco se destaca, debido a que el tren delantero se muestra algo suave y con una tendencia marcada al rolido. Eso la hace un poco imprecisa al querer doblar rápido: arrastra y no se muestra tan ágil. Todo esto, probablemente, la beneficie en la solidez que puede transmitir en caminos en mal estado, donde la Hilux es una referencia. Sin embargo, sus rivales proponen un andar más relajado y eficiente, de eso ya no hay dudas. 

En materia de seguridad, a la dotación previamente mencionada, se tienen que agregar los siete airbags disponibles en todas las versiones, el control de tracción activo, control de descenso y asistente al arranque en pendientes, junto al diferencial trasero con bloqueo, entre otros. 

Conclusiones

El secreto del liderazgo de la Hilux va más allá de sus debilidades. Lo que nosotros podamos criticar en una prueba de manejo no le quitará ventas porque su público fiel sabe lo que está buscado: quiere imagen, confiabilidad y respaldo. 

Todo eso Toyota lo cumple, y de eso hizo su bandera. Hoy la Hilux es reconocida en nuestro mercado como el vehículo que se compra sin ver demasiado sus detalles, sus defectos o sus virtudes. En definitiva, se vende porque es una Hilux.

Precio

Hilux 2.8 SRX 4×4 AT $ 4.500.300

Garantía

5 años o 150.000 kilómetros.

Nos encantó del la Toyota Hilux SRX 2021

Las mejoras en seguridad

La renovación del sistema multimedia

El incremento en la potencia

Las butacas con ventilación

Su solidez en general

No le perdonamos a la Toyota Hilux SRX 2021

El rediseño un tanto light (que no incluye a toda la gama)

Su andar firme y saltarín en caminos en mal estado

La tendencia al rolido del tren delantero

Los detalles de terminación

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Por René Villegas

Periodista y fanático de los autos y el automovilismo desde que tengo uso de razón. Colaboré en las revistas Auto Plus y Parabrisas, y desde 2019 edito Motorweb Argentina.

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