Lo que venía siendo un secreto a voces, hoy finalmente se confirmó. La pickup Mercedes-Benz, que se iba a fabricar en la planta cordobesa de Anta Isabel en una alianza estrategica junto a Renault y Nissan, no será una realidad.
En un comunciado de prensa salido desde la casa matriz en Stuttgart, donde se revisa un primer trimestre comercialmente flojo en todo el mundo para la marca de la Estrella, se menciona entre tantas otras cosas, que el Grupo expresó lo siguiente: «Luego de revisar el caso, y alineados cooperativamente con los socios, se decidió no producir la Mercedes Clase X en Argentina. Además, las ganancias fueron ya golpeadas por gastos para nuevas tecnologias venideras, costos de lanzamiento para nuevos productos, efectos de cambio entre divisas, y gastos por garantias y para el bienestar de clientes. Procedimientos gubiernamentals actuales y las medidas que se vienen tomando contra los vehículos Diesel, tambien tuvieron un impacto negativo en las ganacias.»
Así, y dentro del texto difundido hoy, que reporta las ganancias globales del primer trimestre del 2019, Daimler Benz eligió hacer publico y oficial la cancelación del proyecto de la chata Mercedes hecha en Córdoba. Recordemos que se iba a fabricar junto a la Nissan Frontier que ya se produce en Santa Isabel, a la que se suamria una tercera derivacion, la Renault Alaskan, que está algo demorada también.
Parte de la decisión tendría que ver también con el cambio de politica que asumiría el nuevo CEO del gigante alemán que inventó el automóvil, que cortaría la colaboración estratégica con la Alianza Nissan-Renault-Mitsubishi, para concentrarse en su propia fuerza, y a lo sumo, tender lazos y colaboraciones de desarrollo y fabricación con otros fabricantes alemanes, como podría ser BMW.
Resta esperar el comunicado oficial de Mercedes-Benz Argentina sobre como se procederá con los clientes que ya habían hecho reservas de unidades y con el interés generado por este producto en un mercado que cada vez consume más pickups. Podrían darse dos caminos diferentes: el más logico, importar unidades desde España (como lo viene haciendo Chile desde hace tiempo), o bien suspender completamente su comercialización en nuestro pais.
La cancelación llega no solo como una mala noticia para la indistria automotriz argentina, si no tambien para el gobierno nacional, que se verá, indirectamente, salpicado por una decisión que va mucho mas allá de la crisis que golpea a Argentina actualmente.