En el calendario de eventos nacionales, Autoclásica ocupa un lugar bastante importante para todos nosotros. Algunos lo esperamos con más o menos entusiasmo, especialmente teniendo en cuenta la importancia del mismo para el calendario de la mismísima FIVA. Es el único momento en el año en donde los mortales tenemos acceso a vehículos exclusivos, de ensueño, rarísimos; o incluso podemos acercanos a un evento de similar calibre a los famosos Goodwood, Pebble Beach o Monterey.

Cada año las puertas del Hipódromo de San Isidro abren sus instalaciones a una variedad de vehículos cada vez mayor y más interesante; lo más genial es que Autoclásica es siempre motivo de festejo, porque siempre hay algún aniversario para celebrar: Este año Land Rover, Porsche e incluso el mismísimo Citroën 2CV celebraron sus 70 años; por otro lado modelos emblemáticos para nuestro país, como el Peugeot 504 aprovechaba para celebrar sus 50 años. Por supuesto que no faltaron las lluvias, el día previo éstas le dieron su bendición al evento, como ya es clásico cada año; sin embargo nada cercano a aquel diluvio de 2007 que ahora ya es una simpática anécdota.

Entre lo más destacado, previo a ingresar al predio, sabíamos que el paso por la carpa de «Leyendas Mundiales» era obligado, así también -como fanáticos de la marca- examinar cada modelo expuesto en el boulevard principal por motivo de los 70 años de Porsche; y por qué no descansar en el cada vez más popular «Barrio de las Motos»; donde la cantidad -y calidad- de motos expuestas es cada vez mayor. La jornada era sólo de 10 a 18, así que mejor empecemos.

Al ingresar lo primero que pudimos ver fue la exhibición de Land Rover, un despliegue de Defender en todos los talles y modelos, para todos los gustos; quizás mi sorpresa fue una de las 500 Defender 110 Crew Cab Tomb Raider, las cuales se produjeron en homenaje al mítico personaje de videojuegos que allá por 2002 fue recreado en una serie de películas por Angelina Jolie. Recordaba vagamente la existencia de esta unidad en el país, pero al encontrarla cara a cara aparecieron los recuerdos de su paso por la revista Parabrisas en aquellos tiempos.

En esta edición, en una unión con la embajada de Alemania, se exhibieron en Autoclásica varias unidades del mítico Mercedes Benz 300SL, incluyendo el Gullwing que ganó «Best of Show» hace varios años, que se encontraba cercano a otros «Best of Show» de la muestra, ya que además este año se cumplen 20 años de la primer edición.

«¡Vinimos a ver Porsches y vamos a ver Porsches!», por lo que nos embarcamos al boulevard principal. En la rotonda de ingreso se encontraban dispuestos casi todos los 356 que existen en este país, tanto coupé como roadster, ¡que bueno verlos a todos juntos! Seguimos avanzando y a lo largo del boulevard se encontraban dispuestas varias unidades de 911, de los cuales el 930 era la generación dominante en la muestra seguido detrás por la 901 original; un 944 y un 928 se encontraban incógnitos entre los 911, pero aún parte de la historia. Lamentablemente sólo un 993 fue parte de esta exhibición, una verdadera lástima teniendo en cuenta la cantidad de unidades existentes en nuestro país; como así también ninguna de las ediciones especiales de los últimos años, como el SportClassic de 2009, el 50 aniversario de 2013 o el reciente Turbo S Exclusive Series de este año. Un 997 Turbo se encontraba solo, marcando el final de la exhibición; más adelante nos pudimos cruzar con un 991 GT3 que era parte del decorado en un stand de carpas protectoras para vehículos. En fín…

Sin embargo, uno nunca deja de maravillarse en Autoclásica; más adelante del sector Porsche nos pudimos encontrar con no uno, sino ¡DOS BMW M1!, un par de pasos más y nos encontramos con, a mi parecer, top 3 de Ferraris más lindas de todos los tiempos: la mítica 365 GTB/4 Daytona, junto a un par de DeTomaso Pantera y una Ferrari 308GTB.

Avanzamos hacia la tan anunciada carpa de «Leyendas Mundiales», quizás el encuentro más deseado desde los orígenes de Autoclásica, dónde vehículos integrantes a las colecciones de las familias Pérez Companc y Scalise fueron reunidos bajo el mismo techo, tanto motos como autos integrando una muestra bastante interesante. No sería sorpresa cuando el día domingo, al ser anunciados los «Best of Show», ambos ganadores pertenecieran a este espacio. Sin embargo, encontrar en el mismo lugar a una Ferrari que compitió en Le Mans, Spa y en La Carrera Panamericana; junto a la MV Augusta 500 Four que corrió y restauró Surtees, o la Honda NSR500 con la que Mick Doohan ganó su 4to campeonato del mundo en 500cc -previo a llamarse MotoGP-, es algo que pocas veces sucede.

Nos movemos hacia los laterales del boulevard, donde nos podemos encontrar con cosas poco vistas como el todoterreno de Volvo que según nos comentaron, fue el verdadero ganador en la licitación del ejército nacional dónde Mercedes Benz recibió «una mano» para que ellos, junto al Unimog, se quedaran con la misma. En la vereda contraria, Alfa Romeo presentaba a sus flamantes Giulia y Stelvio, acompañados por un abanico de modelos clásicos de la marca. Seguimos más adelante y seguimos descubriendo joyas, en Autoclásica uno no se puede distraer nunca porque siempre va a aparecer algo que va a llamar la atención, e incluso por la cantidad de vehículos que cada año se suman, es probable que algo te pierdas.

Camino al «Barrio de las Motos» divisamos dentro de un stand para fumadores la presencia de una Ferrari 330 P3, raro verla ahí escondida y no sobre el boulevard principal, indagando dimos con el dueño, que nos contó que se trata de una réplica con un chasis artesanal y a diferencia de la P3 original, un motor V8 de 308 GTS traído directamente de Ferrari, quiénes le dijeron que usara el V8 ya que al usar el V12 se trataría de una falsificación.

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Llegamos a las motos y cada vez son más, de lo más variado y para todos los gustos. Acaso nos seguimos sorprendiendo cuando en DGR llegan motos que ni sabíamos de su existencia en nuestro país? Bueno, eso a la décima potencia. Además de las motos presentadas en la carpa de leyendas, Scalise distribuyó varias piezas de su colección por este sector, una de las cuales detallaremos en otra nota.

Siguiendo con la recorrida, Harley Davidson -que se relanzó este año en nuestro país-, puso toda la carne al asador presentando su gama completa, junto con algunas motos de su larga historia. Lo mismo Royal Enfield, la marca inglesa con cada vez más presencia en el mercado, presentó su gama completa, junto con las intervenciones que ya hemos visto a cargo de STG Tracker.

Para completar, ninguna visita a Autoclásica está completa sin pasar por el autojumble, ese sector que comenzó tímidamente pero ahora se trata de un sector cada vez más grande, incluyendo coleccionistas, autopartistas, objetos de decoración e indumentaria. Ideal para recolectar algún souvenir para traerse a casa.

Los dejamos con una pequeña galería sobre Autoclásica 2018 a cargo de RDZ Photography y estén atentos porque se viene más al respecto.

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Por Pablo Brienza

Siempre atrás de los autos o de las motos, desde los 3 años que aprendí a leer con una revista Parabrisas. En contra del manejo autónomo, a menos que sea para controlar taxis y colectivos. Cada día entiendo menos cómo dan los registros de conducir. Si no estoy disponible probablemente esté en un recital o comprando discos.

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