Finalmente salió publicada en el Boletín Oficial la normativa que permite bajarle los impuestos internos a los autos con motorización híbridas o eléctrica. Se trata, inicialmente, de una ley que abre una ventana de 36 meses para las reducciones tributarias, hasta un cupo de 6.000 unidades en este periodo de tiempo.
El Decreto 331/2017, firmado por el Presidente Mauricio Macri, le da forma a una legislación muy esperada por las automotrices locales, que hasta ahora casi no podían ofrecer tecnologías de energía alternativa en un nuestro país, porque -curiosamente- los Gobiernos anteriores los consideraban «de lujo» y los penalizaban con altísimos impuestos como a cualquier otro auto importado. Es sabido, el fin ulterior de la migración que está sucediendo en el Primer Mundo hacia vehículos de propulsion «verde», es la mejora del daño provocado a diario por la combustión interna de los motores, y sus gases de escape. es una solución que evoluciona y que no solo mejora el medio ambiente a nivel gases, si no que que baja considerablemente el ruido en las ciudades.
Durante este periodo de 36 meses, se experimentará con la importación y el armado de unidades que sean propulsados por plantas motrices híbridas (es decir, parte eléctricos, parte a motor, sea éste naftero, diesel o a hidrógeno), o completamente eléctricos. Los híbridos además se catalogan entre híbridos e híbridos enchufables. Los primeros generan su propia electricidad a partir de un motor complementario a nafta o diesel, y los segundos pueden ser conectados a una red eléctrica para cargar las baterías, incluso a una red domiciliaria. El decreto contempla que habrá reducciones en la alícuota del 35% que se le aplicaba hasta ahora a todos los autos de pasajeros importados extra-zona, es decir, aquellos que vengan de terceros países que no sean los que entran en el beneficio impositivo del Mercosur o México.
Para alentar la industria local, se llega a una quita total de este arancel del 35% a aquellas terminales que ensamblen estos vehiculos en Argentina, sean híbridos o eléctricos. Este formato de fabricación de autos completamente desarmados se llama «CKD» («Complete Knocked Down»). Si los importaran parcialmente desarmados (sistema llamado «SKD», por «Semi Knocked Down»), la alícuota queda en un 2%, mientras que si el auto si importa terminado, el canon impuesto por ser extra-zona será de solo el 5%.
Además del cupo de 6.000 unidades en estos 3 años del programa, las limitaciones aplican también a que solo las Terminales automotrices establecidas en el país podrán beneficiarse con este decreto. Quedan afuera, por ahora, las importadoras que no fabrican nada en el país. tambien quedan afuera pequeños autos, de bajo peso o baja potencia, para evitar una oleada de productos orientales desconocidos, de bajo precio y baja calidad. Quedará para más adelante que marcas como Hyundai, BMW, Porsche o Volvo puedan ofrecer sus autos «verdes» en Argentina.
Esta medida llega justo a tiempo para el Salón del Automovil de Buenos Aires, donde seguramente las terminales locales podrán anunciar – y algunas incluso mostrar en vivo- la llegada de unidades con estas tecnologías de propulsión que están revolucionando el mundo del auto en el resto del planeta. Al día de hoy, solo Toyota argentina ofrece el Prius, aunque con un elevadísimo precio de 955.000 Pesos. Con éste nuevo régimen arancelario, su precio podría bajar en más de 250.000 Pesos.
Algunos de los modelos que podríamos llegar a ver, son variantes electrificadas y/o híbridas de modelos conocidos. En Europa, Japón o Estados Unidos ya circulan con años de éxitos a cuestas. Variantes de autos de gran serie como el Volkswagen Golf y el Passat, el Ford Focus y el Mondeo, el Honda Fit, el Fiat 500, smart, Mercedes Clase C, y hasta la Renault Kangoo podrían engrosar la oferta local en pocos meses más.
Quedará ahora por abrir el debate sobre el fraccionamiento de la electricidad a este fin, hecho que se suma al reciente anuncio de YPF de instalar puntos de carga rápida en mas de 100 estaciones de servicio en el país.
