Entre las novedades expuestas, lo más relevante para este 2010 fueron el Citroën C4 Picasso y el restilizado Citroën C3 XTR, con look aventurero.
El C4 Picasso es la versión corta de 5 plazas del monovolumen C4 Grand Picasso de 7 plazas que ya se vendía en nuestro mercado desde el 2008. Es bastante más canchero y de aspecto mucho más dinámico que el Grand Picasso gracias a su cola más inclinada, los faros traseros apaisados en vez de verticales sobre el pilar D, un paragolpes delantero un poco más agresivo, y la sutil onda que hace la línea de cintura en el lateral debajo de la ventanilla trasera.
Este nuevo familiar llega para completar una familia de 3 monovolúmenes Citroën: el Xsara Picasso, el C4 Picasso y C4 Grand Picasso. Del punto de vista estético creo que el C4 Picasso es inobjetable y es el más lindo de la familia, tiene muy buenas proporciones y trasmite musculatura y dinamismo, cosa poco frecuente en los monovolúmenes que suelen ser más bien “blandos” visualmente. Tal vez se nota mucho que la carrocería del C4 Picasso necesita ruedas más grandes que las mostradas en Pinamar. Pero también es cierto que es un vehículo de neto corte familiar y que el estado de nuestras calles no acompañaría esa decisión de tamaño de llantas como hay en Europa…
El interior del C4 Picasso es genial: luminoso como pocos, entre el gigantesco parabrisas panorámico y el techo acristalado, sumado a la elección de tapicerías de tono claro, hacen del ambiente un lugar sumamente alegre. La calidad del interior es la que todos soñamos que sea la industria Mercosur algún día y no encontré plásticos de calidad flaca o encastres raros entre piezas. Cada tecla se acciona común “click” que suena a buen armado.
Las texturas de los materiales son agradables y se todo muy cuidado. Está lleno de gadgets, desde los tecnológicos hasta las soluciones prácticas como el espejito central para vigilar a los niños atrás, el perfumador de ambiente incorporado a la plancha, las salidas regulables de aire para las plazas traseras en los pilares de las puertas (con comando de velocidad incluido), un millón de espacios, guanteras y huecos para alojar cosas varias, unas lámparas de lectura que están por encima de las mesitas replegables que tienen las plazas traseras, como al estilo de un avión, las cortinitas enrollables para las ventanillas traseras laterales y una largo sinfín de etcéteras.
A mi entender la mayor falla en la configuración de estos dos monovolúmenes C4 en nuestro país ha sido la omisión de la iluminación mediante xenón, con proyectores y lavafaros, ítems que por ejemplo ya están disponibles en el C4 Exclusive de fabricación nacional, de mucho menor precio. Por supuesto que el equipo de seguridad comprende los necesarios airbags frontales, laterales y de cortina, frenos ABS, control de estabilidad y ganchos Isofix.
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El Citroën C4 Picasso se comenzará a vender en los concesionarios de la Red a partir de Marzo con una única motorización Diesel HDI de 110cv y caja manual, a un valor no definido aun, pero cercano a los 120.000 pesos.
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