Noticias de toda clase provienen de Corea. Veo por todos lados novedades provenientes de ese país y a cada nuevo lanzamiento, me surge el mismo comentario: a los autos coreanos los veo cada vez mejores. Más aun, los autos coreanos están cada vez más interesantes y atractivos.

Que podría tener esta reflexión de particular como para dedicarle una líneas? Fácil. Treinta atrás, los autos coreanos eran tan excitantes, sofisticados y durables como un Lada 2105. Todavía recuerdo cuando era chico y se veían esos extraños Hyundai Pony que llegaron tímidamente con la ráfaga de importados de fines de los 70s, principios de los 80s. Creo que de los Pony no debe quedar ni uno sano en el país…
Justamente ese Pony fue el primer auto totalmente coreano de la historia. Recién en 1976 Corea produjo su primer automóvil desarrollado íntegramente en su país (bueno, 90%), gracias a un plan del Gobierno para el Desarrollo de Automóviles Íntegramente Coreanos lanzado un año antes. Las empresas coreanas que se anotaron en ese programa a largo plazo fueron Hyundai, Daewoo, Kia y Ssangyong. 
 
Solo 33 años después, Hyundai es la cuarta automotriz a nivel mundial, superando este año a Ford Motor Co. por 8000 unidades, logrando 2153 millones de ventas globales contra las  2145 M de Ford. Apenas el año pasado Hyundai estaba detrás de Ford en el ranking por un millón de unidades menos. A eso lo llamo yo aprender rápido y superarse día a día…
Actualmente, y si bien la oferta en nuestro mercado local es limitada por temas arancelarios que no favorecen la libre competencia, si nos asomamos a un concesionario de las marcas coreanas presentes en el país como Hyundai o Kia (que en origen son parte del mismo grupo industrial pero aquí son manejadas separadamente), encontraremos autos y camionetas que nada tienen para envidiarles a sus pares japoneses, a la sombra de los cuales crecieron siempre, estigmatizados de ser una copia de estos o un producto de segunda armado con matrices viejas. Ese rumor corrió durante mucho tiempo en los 70s y 80s porque justamente desde Corea contrataban ingenieros japoneses para absorber información y conocimiento de la industria que querían llegar a ser. Hoy en día, en cambio, Corea tiene una industria del automóvil modelo, pujante y con resultados sobresalientes y a la vista de todos.
 
 
El camino que recorrieron los coreanos fue simple: copiaron lo mejor que se les cruzo y lo optimizaron al máximo. Compraron know-how, desarrollando luego el propio, lograron un muy buen nivel de calidad general y por último, en recientes años, salieron a adquirir diseño. Creo que tal vez en un par de décadas más, el Kia Soul sea visto en retrospectiva como el “primer auto coreano de diseño”. Porque reconozcámoslo, los autos coreanos no eran bonitos hasta hace poco. Eran correctos, si, pero no “estaban buenos”. Muchos usuarios de los 90s pueden dar fe que los productos salieron muy buenos, pero distaban de ser artículos de deseo.
Hoy en día, el resultado está  a la vista: Hyundai Génesis Cupé, con su motor V6 de 300cv (impensable hace 20 años atrás), los inminentes Kia Forte y Forte Koup en USA, los europeizados Hyundai i30 (y sus alteregos Kia Cee’d, Pro Cee’d y Cee’s SW) , i20 e i10 (este último, de próximo lanzamiento en el país), la nueva generación del Sorento, el Kia Venga, la próxima Hyundai IX35, etc.
 
Tal vez la movida que bien explica este cambio de filosofía de marcas fue la de establecerse en Europa como locales con centros propios de Diseño, investigar bien como era el pensamiento de estos mercados y devolverles un producto a su medida. Claramente estamos frente a vehículos cada año más seguros, cada año más interesantes, atractivos y con mayor carga de diseño, lo que redunda en una personalidad que jamás hubiéramos imaginado a mediados de los 80s.
De las dos marcas principales, Kia y Hyundai (visto que Ssangyong ya no está presente en el país y lo que produce hoy es ciertamente “particular” en estilo), ofrecen vehículos para todo tipo de públicos. Tal vez Hyundai juegue el papel de la más clásica y Kia sea un poco más innovadora. Localmente es difícil distinguirlo por la oferta  dispar entre ambas en diferentes segmentos, pero navegando las webs de ambas podemos sacar conclusiones. También es cierto que es muy distinto lo que ofrecen en USA de lo que venden en Europa. En Europa, donde el auto mediano y el pequeño son más “sofisticados” (por decirlo de algún modo) tienen modelos mucho más atractivos que en USA, donde aun pesa mucho el tamaño del auto como definitorio de su perfil. En USA las coreanas aun mantienen en su gama baja ese espíritu de auto anónimo  rendidor que las supo rankear muy bien en términos de confiabilidad, atributo que suele ser un muy buen argumento de ventas en ese país.
En Europa en cambio, el mercado es mucho mas peleado y realmente hay que salir a competir con todo para poder lograr un lugar entre tanta automotriz casi centenaria, con tradición, laureles e historia.
Tal vez el próximo paso sea lo deportivo: ofrecer en un futuro pequeños y medianos deportivos a la europea, que son siempre vehículos aspiracionales y generan mucha imagen de marca. Me encantaría eso.
Espero sinceramente ver cada vez mas oferta de modelos coreanos en  nuestro país, para dar batalla en un mercado que necesita ser empujado con competitividad  hacia la calidad y la seguridad, más allá del buen diseño que siempre es bienvenido (es más, es agradecido).  Ojala pudiesen llegar con precios más competitivos, pero ese es tema para otro artículo.

Por Christian Kleinberg

Periodista y Arquitecto, escribo en Motorweb Argentina desde el 2009, año en que cree este sitio. Me fascinan los autos y todas sus derivaciones con 2, 4 o 6 ruedas. Soy de Buenos Aires, pero tambien viví en otros lugares del planeta. Entusiasta de los viajes, de los autitos en escala, de los clásicos y del buen diseño.

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